El presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Producción de la ciudad lamentó el haber llegado a los tres dígitos de índice inflacionario y aseguro que la situación irá aun peor con el correr de las semanas. En este sentido, fue claro y manifestó que se están haciendo las mismas cosas buscando una solución diferente.
Después de haber conocido la inflación de febrero de este año, que fue del 6,6% y acumuló un 13,1% en el primer bimestre, Guillermo Ceriani mostró su preocupación y se desligó de todo tipo de responsabilidades debido a las acusaciones que recibe. «La situación económica no hace falta que la describa, es una locura lo que vivimos los consumidores desde comerciantes hasta industriales. Muchas veces nos dicen que somos parte del problema y no es tan así porque tampoco somos formadores de precios. Argentina y la Patagonia tienen un potencial muy grande por desarrollar y plantear ideas claras», explicó esta mañana en conversación con La Petrolera 89.3.
Detallando lo perjudicial que resulta ser el aumento del IPC, señaló que esto atacará a los más vulnerables y que próximamente impactará en todos los argentinos. «Desde el sector privado no hay ideas ni planes, eso es lo que nos preocupa. No hay propuesta política ni económica que nos satisfaga, hay incertidumbre sobre lo que va a pasar mañana y por eso se disparan estas corridas, también por gastar más de lo que entra«, argumentó.
«Tenemos que estar despiertos y no podemos perder momentos ni generar una operación conociendo el precio de reposición. Es una vorágine en la que no podemos salir, pero reitero: mientras el Estado siga gastando más de lo que tiene, no vamos a mejorar. Se están usando los mismos remedios para los mismos problemas y así nos va a ir», lamentó, con críticas hacia el oficialismo por no poder enfrentar seriamente el principal problema en el país.
Recordando viejos momentos de la economía nacional, fue duro de acuerdo al pronóstico que se podría llegar a esperar y además le dejó una sugerencia a la clase política: «muchos preguntan si vamos a ir a una hiperinflación y cuando la tuvimos antes empezamos así. Hay que abrir urgentemente la economía para que entren dólares frescos, pero para eso hay que cambiarle la cabeza a la clase política. En vez de cerrarnos al mundo tenemos que abrirnos», concluyó el presidente de la CACIP.
