
En la madrugada del sábado, un operativo denominado “Rompiendo Cadenas” permitió desbaratar una organización dedicada a la trata de personas con fines de explotación sexual en Comodoro Rivadavia. La intervención, coordinada por la Oficina de Lucha contra la Trata de Personas —dependiente de la División Drogas y Leyes Especiales—, se llevó a cabo a las 00:00 horas tras una investigación de dos meses.
Bajo la carátula “NN sobre infracción a la Ley 26.842”, se ejecutaron cinco allanamientos y tres detenciones, con autorización de la jueza federal de garantías, Dra. Eva Parcio de Seleme, a pedido de la Unidad Fiscal Federal de Delitos Complejos.

Los operativos tuvieron lugar en tres domicilios identificados como centros de explotación sexual, dos ubicados en pleno centro de la ciudad y uno en el barrio Juan XXIII. En estos lugares, varias mujeres provenientes de provincias como Jujuy, Buenos Aires y Córdoba eran explotadas sexualmente.
Según fuentes oficiales, la organización era liderada por una mujer mayor de edad, quien junto a sus dos hijos —un varón y una mujer— coordinaban de forma estructurada la captación, control y explotación de las víctimas, manejando lo que fue calificado como una “empresa familiar del delito”. La madre pactaba encuentros, tarifas y jornadas extensas; sus hijos se encargaban de la logística.

En los lugares allanados se encontraron condiciones deplorables: espacios reducidos, falta de higiene y ausencia de controles médicos en las víctimas.
El Programa Nacional de Rescate de Víctimas de Trata de Personas intervino en el procedimiento, logrando el rescate de cuatro mujeres mayores de edad, quienes fueron derivadas a centros asistenciales y se encuentran bajo resguardo en coordinación con el Ministerio Público Fiscal y la Comisaría de la Mujer Zona Sur.
Los tres detenidos —dos mujeres y un hombre, todos mayores de edad— quedaron alojados en distintas dependencias policiales. En los procedimientos se secuestraron elementos clave para la causa: documentación, anotaciones, dinero en efectivo y evidencia que confirma que los espacios estaban especialmente acondicionados para la explotación.
Las irrupciones fueron llevadas adelante por personal del GEOP, con apoyo de la Guardia de Infantería, desarrollándose sin incidentes. La diligencia fue supervisada por el Comisario Mayor Jorge Vistoso, jefe del Área Drogas y Leyes Especiales, y firmada oficialmente por el Subcomisario Daniel Debis.
Los detenidos comparecerán en las próximas horas en una audiencia de control de detención ante la Oficina Judicial, con horario a confirmar.