En el momento que arribaron efectivos policiales al comercio por el ruido de las alarmas no encontraron a nadie hasta que se dieron cuenta que el delincuente estaba en el interior de una heladera y pudieron detenerlo.
Alrededor de las 2 de la mañana, las alarmas del supermercado Buenos Días, situado en la vieja terminal de la ciudad de Córdoba comenzaron a sonar inesperadamente. Al no encontrar absolutamente nada por el lugar, se dieron cuenta que un ladrón se estaba ocultando en una de las heladeras que estaba sin funcionamiento.
Tras el hallazgo, los uniformados capturaron al delincuente de 31 años que tenía 54 mil pesos de recaudación, dos teléfonos celulares, dos botellas de vino tinto y ¡una mochila cargada con ocho paquetes de galletitas Oreo!
“Rompió un vidrio que está debajo de un aire acondicionado y gracias a nuestro equipo de monitoreo lo vimos. La Policía vino, entró, pero no lo encontraban. Después lo vieron adentro de una heladera que está en desuso«, explicó Ricardo Bagur, el encargado del comercio en diálogo con un medio local.
