La posición sobre los organismos fue anticipada hoy por el canciller Héctor Timerman, quien junto al ministro de Economía, Amado Boudou, son los funcionarios argentinos de más alto rango que participan de la reunión del G20 que se realiza en París. Timerman adelantó que está «en contra del rol que juegan ahora» los organismos multilaterales de crédito y por eso brindó su respaldo a la reforma impulsada por Francia en el seno del G20. «Argentina no está en contra de los organismos internacionales de crédito. Argentina está en contra del rol que juegan ahora» esas entidades porque «deben reflejar la realidad que estamos viviendo ahora y no cuando fueron fundadas», dijo el canciller.
Este viernes se realizó la primera reunión de ministros de Finanzas del G20, que integran economías industrializadas y emergentes. Timerman insistió en que «otra suerte hubiésemos tenido los países que sufrimos las crisis en los años 90 y en el 2000 si el Fondo Monetario Internacional, por ejemplo, hubiese tenido representación de los países que hoy en día son más fuertes como China, India y Brasil, Sudáfrica».
Argentina congeló en 2006 su relación con el FMI al cancelar una deuda de 9.500 millones de dólares en un solo pago y evitar así los monitoreos periódicos de ese organismo al que acusó de provocar las crisis de los 90 por sus planes de ajuste.
Otras «coincidencias» de Argentina con Francia en el seno del G20 son la «transferencia de tecnología, una mayor justicia del comercio y la necesidad imperiosa de terminar con el lavado de dinero y los paraísos fiscales», sostuvo Timerman.
«Con Francia hemos tenido más encuentros que desencuentros en el G20», aseguró el canciller de Argentina, cuyo país preside el Grupo de los 77 (G77) de los cuales siete miembros integran también el G20. La cancillería francesa subrayó en un comunicado «la calidad de las relaciones bilaterales» tras este primer encuentro entre los dos cancilleres, que asumieron sus cargos en 2010.
Francia destacó la «posibilidad de perspectivas de colaboración en el ámbito nuclear civil», en proyectos de construcción de centrales nucleares en Argentina y la puesta en marcha de un centro de investigaciones. Timerman precisó que París anticipó que en todas sus propuestas contemplará «la transferencia de tecnología». Ambas partes destacaron la cooperación científica y cultural.
