Una mujer falleció de un infarto al regresar a su casa, en la en la ciudad de Guaymallén, Mendoza, y encontrar que su hijo había sido golpeado y maniatado por ladrones.
El hecho ocurrió cerca de las 10 de la mañana de ayer, cuando María del Carmen Costabile, de 78 años, entró a su vivienda ubicada en las calles Santa Rosa y Ciudad de Alta Gracia, de la localidad antes mencionada, a unos 14 kilómetros de la capital provincial. No bien ingresó, la mujer se encontró con una escena que no pudo soportar: uno de sus hijos estaba atado y golpeado. Ladrones habían irrumpido al inmueble, en el barrio San Cayetano, minutos antes.
El joven contó luego a los investigadores que al verlo en esa condición su madre se descompensó y cayó al piso. Como pudo, y en medio de la desesperación, el hijo se desató e intentó asistir a la mujer, pero como no reaccionaba dio aviso a la línea de emergencia 911. Pese a que los médicos le realizaron las maniobras de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) no pudieron salvarla. Costabile falleció de un infarto, por lo que se dio intervención al Cuerpo Médico Forense, indicaron las fuentes.
Tras lo sucedido el hijo de la víctima relató que horas antes él se encontraba durmiendo en la vivienda cuando dos sospechosos lo sorprendieron dentro de su casa. Contó que, sin mediar palabras, los asaltantes le taparon la cabeza y bajo amenazas lo redujeron y lo maniataron. Luego de reducirlo, los delincuentes, según lo dicho por el hombre, recorrieron la vivienda y se dieron a la fuga con 30.000 pesos y dejándolo a él maniatado.
Por su parte una de sus hermanas, Mónica Cabrero, se mostró dolida e indignada en la puerta de la casa. “¡Esta es la inseguridad que vivimos todos los días!”, dijo según reportó el diario local Uno. “Mataron a mi mamá por miserables 30 mil pesos, es todo lo que había en la casa”, agregó.
“Estaba mal del corazón, pero vivía tranquila y no tenía problemas. Estaba metida en su mundo, con sus plantitas y no concebía tanta violencia. Siempre la retaba porque habitualmente estaba confiada afuera, regando el jardín y con la puerta abierta, y acá es impresionante la cantidad de asaltos que hay”, detalló la hija.
Asimismo añadió: “Precisamente esta mañana (por ayer) regó las plantas y se fue a comprar. Parece que se han metido por el fondo y lo encontraron a mi hermano, que trabaja en seguridad en la noche, y estaba durmiendo. Le taparon la cabeza y le pusieron un cable en el cuello y lo ahorcaban para que dijera dónde había plata. Lo golpearon mucho y revolvieron por toda la casa antes de irse con unos miserables 30 mil pesos”.
Personal de la Policía Científica trabajó en el lugar con el objetivo de reunir elementos para dar con los delincuentes y determinar la mecánica del hecho, por lo que esperan los resultados de las pericias. Lleva adelante la instrucción la fiscalía de Jurisdicción, Guaymallén, Mendoza.
