Belén Santana decidió en 2019 comenzar su formación terciaria con el deseo de continuar la carrera docente que también comparte su madre. Este año, la joven tendrá que cursar por tercera vez las unidades curriculares del tercer año y denuncia que los contenidos no se modificaron a sus condiciones de aprendizaje, indica diario Crónica.
En sintonía, denuncia que no recibió devoluciones de sus trabajos y que no hay acompañamiento de los docentes, ni del equipo coordinador de la carrera. Por estos motivos, Belén decidió dar a conocer su situación.
Con una discapacidad cognitiva en donde sus procesos de aprendizaje son diferentes, a lo largo de su vida se enfrentó a distintas circunstancias que la condicionaron, tanto en la escuela primaria como en la secundaria, sobre todo por la poca inclusión dentro de las aulas.
Gracias al acompañamiento de profesionales y de su familia, logro sobreponerse a las adversidades y continuar con su educación hasta perseguir su objetivo de estudiar el Profesorado de Educación Inicial. Pero cuando llegó al tercer año, los docentes no realizaron las adecuaciones correspondientes en las materias ni tampoco le brindaron soluciones para que pueda continuar con sus estudios.
“Estoy estudiando en el Instituto Superior 802 la carrera de Nivel Inicial y quiero que la Coordinadora de Carrera trabaje comprometidamente con su función para garantizar mi derecho a estudiar, hablando con los profesores y exigiéndoles que hagan los ajustes que sean necesarios”, manifestó.
Y apuntó: “Si la coordinadora de carrera realmente me tuviera en cuenta y me hubiera acompañado, yo no haría por tercera vez su materia. Estoy hace cinco años y el año que viene haré por tercera vez sus materias. Hay discriminación y vulneración de mis derechos”, afirmó.
A pesar de tener reuniones con los docentes y directivos, no se presentaron planificaciones para garantizarle una cursada adaptada. Tampoco le entregaron trabajos prácticos con devoluciones, impidiendo que haya un seguimiento de sus avances.
Por tanto, luego de pedir intervención en las áreas correspondiente, su madre Marta Remolcoy, como su acompañante, presentaron notas solicitando reuniones con el Ministro de Educación de este año, mientras espera ser convocada por la gestión entrante que tiene al frente a José Luis Punta.
Igualmente, se refirió a la importancia de garantizar la inclusión de las personas adultas con discapacidad en la educación, que permite generar autonomía: “Mi sueño es terminar de ser una seño, ya fui a un jardín y fue una experiencia muy linda. Espero que se pueda arreglar todo esto porque detrás mío siguen otras personas y no quiero que les pase lo mismo”, finalizó.
