En el penal de San Luis al que fueron trasladadas, un grupo de reclusas atacaron a las principales acusadas por el crimen del niño de cinco años que murió a causa de fuertes golpes en su cuerpo.
Magdalena Esposito Valenti, madre de Lucio, y Abigail Páez, su novia, fueron agredidas por presas del penal de San Luis al enterarse del crimen de Lucio Dupuy. Según indicaron los peritos, el joven había sido brutalmente golpeado e incluso presentaba heridas de violación.
El forense a cargo del caso, Juan Carlos Toulouse, aseguró que el niño tenía desde mordeduras hasta quemaduras de cigarrillos y golpes con objetos contundentes.
La historia clínica de Lucio menciona que varias veces fue atendido por traumatismos en su cuerpo durante este año y el anterior. Incluso presentaba la deformación en uno de sus dedos por no haber atendido a tiempo la fractura de falange.
Otros de los registros indican que también había sufrido fracturas en una de sus manos y muñecas,