
En medio de los preparativos para el Cónclave que elegirá al sucesor del papa Francisco, fallecido el pasado 21 de abril a los 88 años, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a generar polémica al publicar una imagen en la que aparece vestido como Papa. La foto fue compartida en su red Truth Social y en Instagram, y habría sido generada con inteligencia artificial.
En la imagen a color, se lo ve a Trump sentado con gesto solemne, luciendo una sotana blanca, mitra papal y una cruz dorada colgando del cuello. Con la mano izquierda sobre el muslo y el dedo índice derecho apuntando al cielo, el republicano no acompañó la publicación con ningún comentario, pero su gesto fue interpretado como una nueva provocación política y religiosa.

Días atrás, Trump había sorprendido al declarar ante la prensa: “Me gustaría ser Papa. Sería mi primera opción”, al ser consultado sobre sus preferencias respecto del futuro líder de la Iglesia Católica. La afirmación generó revuelo entre los fieles y en el ámbito diplomático, especialmente luego de que se conociera que Francisco mantuvo una reunión privada, horas antes de su muerte, con el vicepresidente estadounidense James David Vance, un político ultraconservador y católico converso.
Durante esa audiencia, el ahora fallecido pontífice argentino criticó duramente las políticas migratorias impulsadas durante la gestión de Trump, alertando sobre una “crisis grave que empieza mal y acabará mal”.
En una posterior rueda de prensa, el expresidente añadió: “Tenemos un cardenal que resulta ser de un lugar llamado Nueva York que es muy bueno, así que veremos qué pasa”, en referencia al cardenal Timothy Dolan, arzobispo de esa ciudad. Sin embargo, entre los principales candidatos al trono de San Pedro figura otro estadounidense: Joseph Tobin, arzobispo de Newark.
Actualmente, alrededor del 20% de la población estadounidense se identifica como católica, y en las últimas elecciones presidenciales, cerca del 60% de ese electorado votó a favor de Trump.
Reacciones internacionales
La imagen no pasó desapercibida. El senador italiano y exprimer ministro Matteo Renzi criticó duramente la publicación en su cuenta de X (antes Twitter): “Se trata de una imagen que ofende a los creyentes, insulta a las instituciones y demuestra que al líder de la derecha mundial le gusta hacer el payaso”. Y agregó: “Mientras tanto, la economía estadounidense está en riesgo de recesión y el dólar está perdiendo valor. Los soberanistas causan daños en todas partes”.

El Cónclave que elegirá al nuevo Papa se celebrará el próximo 7 de mayo en la Ciudad del Vaticano, y todo indica que Trump no dejará de intentar captar la atención hasta entonces.