Subastarán la planta de Guilford en 400 millones de pesos pero no alcanzará para pagar las indemnizaciones

El próximo mes se realizará el remate de la última planta de Guilford, pero el monto base está por debajo de lo necesario para abonar la totalidad de las indemnizaciones pendientes.

jueves 18/04/2024 - 9:05
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La subasta está prevista para el 4 de mayo a las 12 horas, con una base de casi 400 millones de pesos. Sobre el tema, el abogado Jorge Echelini dialogó con Diario Crónica y explicó que «esa planta es la que está en Km8, es la única que le quedaba a Guilford, que tenía dos: una en Hipólito Yrigoyen que se vendió antes de que cerrara y la otra en Kilómetro 8 que se abandonó cuando Guilford cerró sus puertas».

«Esa planta tiene un montón de embargos, de juicios laborales, muchos son míos, no todos, y en uno de los míos sale a subasta ahora con el precio exhibido en el diario, por unos 400 millones de pesos, que sería el precio base para pujar en la subasta, menos de ese precio no se puede ofrecer y gana el que ofrece más», indicó.

«Con eso se espera tratar de pagar parcialmente los juicios laborales que ya están terminados y que son un montón. Yo represento a 186 trabajadores, y debe haber unos 230 o 240 en total representados por otros estudios. No todos tienen embargo sobre la planta pero sí una gran mayoría, que son los que esperan a ver qué sale de todo esto y cuánta plata alcanza para pagar en parte los juicios”, agregó.

Además, remarcó que “las indemnizaciones no fueron abonadas, pasaron 8 años de los despidos, si tuviera que actualizar el monto de los que son mis clientes, las deudas judiciales, estoy en un monto que la planta no alcanza a pagar”.

«El monto actualizado de todos los créditos de los trabajadores debe andar en el orden de los 1.500 millones de pesos, no creo que esa planta se logre vender por ese monto, así que habrá que distribuir el producto de la venta en base a cada uno de los juicios”, indicó.

En tanto, Echelini comentó que hubo varios desaciertos en las decisiones tomadas por parte de la Justicia y el Estado. “Nunca hubo denuncias, pese a la gran cantidad de amenazas de todos, incluso del gobierno, nunca se avanzó en denuncias penales, pero en definitiva, la denuncia puede ser el vaciamiento de la empresa y para eso hay que tener pruebas, que nosotros por lo menos no las teníamos. Lo que tuvimos fue el cierre de una empresa, una de las tantas porque también no nos vamos a sorprender, Guilford era la última empresa que quedaba en Comodoro, pero en el historial fueron cerrando una a una, muchas con despidos parecidos, se me viene a la cabeza Araucan donde terminó igual, con gente en la calle y vendiendo la planta para cobrar; lo mismo pasó con Cortilene y con cada una de las textiles, esta fue la última”.

Asimismo, opinó que “lo que hubo en el medio fueron una serie de desaciertos muy grandes tanto de la Justicia en un primer momento, con una opinión que no comparto, y después de ciertas políticas del Estado que me parecen erróneas, que terminaron no asistiendo a nadie, no ayudando a nadie más que esos pequeños bonos de asistencia que se pagan mensualmente y no alcanzan ni para pagar la luz”.

«Estamos así hoy, con una gran cantidad de trabajadores, por suerte muchos ya jubilados porque lograron alcanzarla, pero muchos sin nada con qué sostenerse”, concluyó.

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