Patagonia Argentina sigue sin cumplir los puntos de la licitación que ganó

Según los pliegos del contrato firmado hace cuatro años, la empresa se comprometía a instalar en los colectivos rampas de acceso para personas con capacidades diferentes, pero las unidades todavía no cuentan con las mismas….

lunes 02/05/2011 - 12:00
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Según los pliegos del contrato firmado hace cuatro años, la empresa se comprometía a instalar en los colectivos rampas de acceso para personas con capacidades diferentes, pero las unidades todavía no cuentan con las mismas. Las máquinas electrónicas que expiden boletos tampoco cumplen totalmente su objetivo, ya que el chofer debe seguir distrayendo su atención al conducir en marcar el importe o en recibir bonos. También existen quejas sobre la puntualidad del servicio y el exceso de pasajeros sobre las unidades en horarios pico.

En abril de 2007, la empresa Patagonia Argentina obtuvo de la Municipalidad de Comodoro Rivadavia la renovación por diez años del contrato de concesión para operar el sistema de transporte público de pasajeros.

La gerencia de esa empresa confirmó a Diario Patagónico que en la actualidad cuenta con una flota de alrededor de 100 unidades y 220 choferes para cubrir el servicio que durante cada jornada se presta desde las 4 de la mañana hasta la 1 del día siguiente.

Sin embargo, pasados cuatro años de la renovación del contrato, Patagonia Argentina todavía no cumple con puntos importantes del pliego de licitación. Uno de ellos es la instalación de rampas de acceso para personas que utilizan sillas de ruedas. Además, los usuarios se quejan con frecuencia por el exceso de pasajeros y el incumplimiento de horarios.

Incluso existió una tardanza en la utilización de las máquinas expendedoras de pasajes. En el convenio firmado en 2007 la empresa se comprometía a instalar dichas máquinas –para el cobro electrónico de pasajes mediante monedas y tarjetas– en un plazo de 365 días.

Recién el 16 octubre de 2009 comenzó a funcionar el sistema, pero no da vuelto en monedas, ni acreditan una devolución en la tarjeta magnética que utilizan los pasajeros frecuentes.

Lo más preocupante es que el chofer tiene que distraer su atención en marcar el importe del boleto según el destino y también en la recepción de los bonos con los que pagan su pasaje estudiantes y jubilados.

Todo ello se buscaba evitar con la instalación de las máquinas, con el objetivo de que el chofer fijara exclusivamente su atención en conducir. De esa forma, se está violando la Ley Nacional de Tránsito 24.449, que exige que el chofer de una unidad de transporte de pasajeros conduzca la unidad sin distracciones para evitar accidentes de tránsito.

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