Casi 17 horas después de haber sido rescatada por un joven agente de policía de las gélidas aguas del océano Atlántico a la altura de la Iglesia Schoenstatt de la avenida Ducós, falleció finalmente la joven mujer que había caído al mar.
El hecho se produjo en confusas circunstancias y cuando la mujer se encontraba en compañía de su pareja, un hombre identificado como Diego Fernández. Este dijo a los investigadores policiales que se encontraba con su pareja y circunstancialmente la dejó sola para ir a buscar cigarrillos a su automóvil y cuando regresó había caído al agua.
La víctima fue identificada como Verónica Ester Bórquez, tenía 29 años y era madre de dos niños de corta edad. Según el único testigo, tal como Crónica lo informó en su edición anterior, el hecho ocurrió pasadas las 4 de la mañana del sábado 7 de enero, luego de que ambos anduvieran de recorrida en algunos boliches céntricos y de que la mujer insistiera en ir a ese lugar.
De acuerdo a dichos del testigo, la pareja se encontraba sentada en uno de los murallones situados entre la Iglesia Schoenstatt y el Gimnasio “Socios Fundadores” y mirando hacia el mar, cuando el joven decidió ir hasta su automóvil en busca de cigarrillo, y cuando regresó la mujer había caído al mar.
Se informó y llegaron efectivos de la Prefectura Naval Argentina, policías de la Seccional Primera, Defensa Civil Municipal y hasta la unidad de rescate de los Bomberos Voluntarios, pero fue el joven agente Jonathan Díaz (21) el que la salvó.
El policía con uniforme y todo se arrojó a procurar el rescate de la mujer y estuvo por espacio de media hora lidiando contra el oleaje y las gélidas aguas, hasta que logró rescatarla.
La mujer fue trasladada en gravísimo estado al Hospital Regional, donde tras vanos esfuerzos de los médicos por salvarle la vida, falleció esa misma noche.
El hecho generó una confusa situación, que es investigada por los efectivos policiales y mucho tendrán que ver las declaraciones de Fernández, pareja y único testigo del acontecimiento. Sus declaraciones permitirían dilucidar si la mujer se arrojó voluntariamente, o bien trastabilló y cayó accidentalmente para epilogar con el trágico resultado.
Fuente: Crónica
