En otra casa, con el mismo vacío en el alma y en el corazón, Juan, Margot y Brandon conviven con el dolor de saber que Leonela no volverá jamás y que el único responsable según la Justicia está internado en un neuropsiquiátrico, pero jamás será llevado a juicio por ser un menor inimputable.
Lejos de vivir, la familia de Leonela Aguirre sobrevive al recuerdo, a la ausencia, revive por estos días aquel infierno que hoy continúa.
“Seguimos en pie gracias al apoyo de la familia, pero es muy difícil superar el dolor, no lo podemos superar aún y en definitiva no nos podemos despertar de este sueño horrendo que estamos viviendo desde que Leonela desapareció”, señaló Juan, el papá de la nena que adoraba ser bailarina de folclore.
“Es muy difícil estar en el lugar en el que estamos nosotros, no se lo deseo a nadie. Cada día de nuestras vidas recordamos a Leonela, pasaron muchas fechas que es inevitable no volver el tiempo atrás, en febrero fue su cumpleaños y además de extrañarla más que antes sentimos impotencia, bronca y muchas cosas se cruzan por la cabeza”, agregó Juan.
Justicia injusta y engañosa
La causa de Leonela Aguirre hoy está cerrada para la Justicia. La investigación culminó con la culpabilidad de un menor inimputable por lo que nadie pagará por el secuestro, violación y muerte de Leonela. “Desde que supimos lo del menor dijimos que acá alguien más tiene que haber, sólo no fue. Acá, la realidad es que a la delincuencia la hace hablar por un robo y a él nadie lo hizo hablar, la Justicia no me dio respuesta alguna para esto”, sostuvo el papá de la nena quien además fue un poquito más a fondo y remarcó que “las cosas evidentemente no se hicieron bien desde un principio. Dijeron que ya tenían al asesino y nada de eso era verdad. Primero culparon a una persona que no tuvo nada que ver, mientras tanto nos hacían creer que había sido él (Pablo Bell)”.
Margarita Aguirre, tía de la pequeña compartió la charla y agregó que “nosotros pensábamos que Bell había tenido algo que ver porque desde la Fiscalía nos decía que era él, que tenía algo que ver y que era el culpable. Nos dijeron siempre que él era el culpable”, a lo que Margot, mamá de Leonela, remarcó “nos llenaron la cabeza con que tenían al asesino y nosotros lo creímos, con el tiempo, todo se cayó y la muerte de mi hija no tiene justicia”.