En el marco de las reuniones previstas con los distintos secretarios para el análisis del Presupuesto 2016, esta mañana los concejales en plenario recibieron al titular de Economía y Hacienda, Diego Touriñán, junto a la subsecretaria de Gestión Presupuestaria, Rita Cárdenas y el subsecretario de Desarrollo Urbano, Luis Romero.
El diálogo se desarrolló principalmente en torno a las obras contempladas en el Presupuesto 2016 y las prioridades de la ciudad. En este marco, los concejales manifestaron la necesidad de darle prioridad a los servicios públicos, uno de los reclamos fuertes de vecinos de diversos barrios de la ciudad.
En este sentido, el presidente del Bloque Cambiemos, José Gaspar, manifestó: “No puede ser que el 30% de la población siga sin servicios básicos. El Presupuesto contempla una partida importante para dar soluciones y espero que se cumpla, que se hagan las obras necesarias y si es posible ahora, en el verano que el clima lo permite”.
Entre otros temas, se pidieron detalles con respecto a las mil cuadras y se hizo hincapié en la ausencia de una partida especificada para realizar obras en el Camino Roque González, un lugar neurálgico para trabajar sobre los accidente vehiculares que todos los años suma estadísticas trágicas.
Los vecinos de los nuevos barrios que subyacen a la vera del Camino, reclaman estas obras desde la gestión anterior, como la colocación de luminarias y reductores de velocidad, para mermar la cantidad de accidentes. Al respecto, el presidente del Bloque del FpV, Mario Soto, explicó que se le solicitó al Ejecutivo la posibilidad de incluir una partida específica Presupuesto “para que los vecinos vean que está establecido en el Presupuesto y que se va a cumplir con el reclamo”.
Otro de los temas tratados fue la necesidad de hacer cumplir la ordenanza aprobado en diciembre del 2014 –con una modificación en abril del 2015- sobre la necesidad de reparar las veredas céntricas.
El proyecto establecía que los propietarios debían reparar y mantener las veredas céntricas, algo que sólo algunos cumplieron y con su criterio particular, pese a que en la última modificación se establecía un beneficio para quienes lo hicieran.
En este marco, la nueva gestión pretender hacer cumplir con la ordenanza y embellecer el centro, aunque la inversión primaria sea del municipio. “Empezaremos a regularizar el centro con veredas. Tenemos que ver de qué manera comenzamos a trabajar con los comerciantes y propietarios para que las arreglen, uniformar el estilo, los carteles, las marquesinas, no sólo en calle San Martín sino en todo el centro”, explicó Mario Soto.
El edil reconoció la dificultad de lograr un acuerdo con los propietarios porque “sabemos que si le tocás el bolsillo se molestan, pero la idea es unificar un proyecto y avanzar en conjunto para que se haga, porque los vecinos también reclaman por el mal estado de las veredas céntricas”.
Una de las posibilidades es que la Municipalidad pueda financiar los costos de un proyecto de veredas de estilo unificado y luego se cobre a los propietarios mediante el impuesto inmobiliario.