Las principales Bolsas europeas cerraron ayer ligeramente a la baja tras un intento fallido de rebote, intento que frustró el nuevo desplome del precio del crudo.
La sesión en Europa comenzó ligeramente a la baja tras la fuerte caída que había experimentado la Bolsa china de madrugada. Sin embargo, la estabilidad del yuan y las manifestaciones de las autoridades chinas, que hoy se repiten, insistiendo en su compromiso de mantener su divisa estable y de no utilizarla para incrementar la competitividad de sus productos, sirvió para calmar algo el ánimo de los inversores. Este hecho y el elevado nivel de sobreventa de muchos valores permitieron a los principales índices de la región girar al alza y ponerse en positivo.
El sector bancario, con el Santander a la cabeza (la entidad se vio favorecida por una positiva recomendación por parte de una casa de análisis) fue el que durante toda la mañana «tiró del carro», liderando el avance de los índices. En el mercado de bonos hubo tomas de beneficios, especialmente en el italiano y en el español, este último ligeramente lastrado a su vez por la tensión política generada por el independentismo catalán (la prima de riesgo española repuntó ayer ligeramente).
La apertura alcista de Wall Street sirvió para apuntalar los avances en los mercados de valores europeos. Sin embargo, el hecho de que la caída del precio del crudo se acelerara durante todo el día había estado cediendo cerca del 2% hizo saltar todas las alarmas (llegó a ceder más del 6%) y arrastró a la baja a la renta variable occidental.
Así, y mientras los principales índices bursátiles estadounidenses entraban en números rojos, los europeos se giraban a la baja cerrando, como hemos señalado, con ligeras pérdidas. Por su parte, los estadounidenses fueron capaces de recuperar terreno durante la última hora de la sesión, terminando el día de forma mixta pero sin apenas variación respecto al día precedente. Los valores relacionados con las materias primas y el petróleo fueron ayer los que peor comportamiento mantuvieron en este mercado, convirtiéndose un día más en un lastre para los índices.
Señalar, en este sentido, que ayer el precio del crudo terminó la sesión a su nivel más bajo en 12 años y hoy sigue cediendo en los mercados asiáticos. Es complicado determinar el por qué de la fuerte caída de ayer, pero es posible que el miedo a que la revalorización del dólar frente al yuan puede lastrar la demanda de crudo por parte de China, el principal importador mundial, estuviera detrás de este comportamiento. También el incremento de las posiciones cortas y que las largas se encuentren a su nivel más bajo en muchos años creemos que está provocando este nuevo desplome del precio del crudo.
Por último, y en lo que hace referencia a la sesión de hoy, señalar que ayer comenzó de forma oficiosa la temporada de presentación de resultados trimestrales en Wall Street con la publicación tras el cierre del mercado de las cifras de la compañía Alcoa. Aunque éstas fueron débiles, consecuencia de la caída que han experimentado en el último año los precios del aluminio, superaron lo esperado por los analistas. En un primer momento las acciones de la compañía subieron con fuerza en operaciones fuera de hora aunque, poco a poco, fueron cediendo terreno. Por tanto, entendemos que el efecto de los mismos en la apertura hoy de las bolsas europeas será testimonial.