La policía de Gaiman intervino en la persecución de un auto, marca Toyota modelo Etios de color bordó, en el que iban dos menores de 16 años que intentaron evadir un control de tránsito. Los jóvenes aceleraron su marcha, casi atropellando a los agentes involucrados, y sufrieron un accidente a los pocos metros.
Los agentes siguieron al vehículo a alta velocidad, pero lo perdieron de vista cuando este apagó sus luces. Al regresar al lugar, se constató que el vehículo había volcado y sus ocupantes habían escapado hacia una chacra cercana. Al ser interceptados, los jóvenes se tiraron al suelo y manifestaron ser menores de edad.
Los adolescentes fueron trasladados al Hospital para evaluar sus lesiones y los Bomberos brindaron asistencia en el lugar.