La jornada de hoy puede resultar clave para hallar un camino de diálogo que lleve a resolver la ya dilatada paralización de los yacimientos petroleros del flanco norte santacruceño. Ello surge de una serie de viajes y reuniones. En tanto, voceros de las compañías petroleras aseguraron que aún no enviaron telegramas ni de despido ni de intimación al trabajo.
Cabe recordar que la huelga que se desatara el primer día de abril se transformó en la más conflictiva que haya existido en este ámbito debido a la anarquía en que está sumido el gremio petrolero de base en el propio seno de la comisión directiva y en el cuerpo de delegados.
Sin embargo, en el curso de las últimas horas comenzaron a surgir indicios que podrían sugerir la posibilidad de hallar una paz consensuada entre los grupos disidentes y las cámaras empresarias, a instancias de la intervención de referentes de organismos provinciales y nacionales en el rol de mediadores.
Segovia en Río Gallegos
A modo de ejemplo, ayer por la mañana el ministro jefe de Gabinete, Pablo González, recibió en Rio Gallegos al secretario general del sindicato de base, Héctor Segovia, y a 17 miembros de comisión directiva que se mantienen a su lado.
El encuentro también contó con la presencia del secretario de Trabajo de la provincia, Raúl Santibáñez, y de acuerdo a las fuentes consultadas los funcionarios provinciales se comprometieron a pedir a Roberto Baratta, uno de los principales colaboradores del ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, que vuelva a invitar al sector gremial opositor y a las cámaras empresarias para establecer una propuesta negociadora.
En ese sentido no se descarta que pueda acelerarse la puesta en vigencia del nuevo Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) que era el principal motivo en que se basaban los dirigentes disidentes y la mayoría de los delegados para mantener la medida de fuerza, avalada en asambleas de afiliados por ellos mismos convocadas.
Al encuentro de Río Gallegos estuvo también convocado el secretario adjunto y líder de los opositores, Rubén Retamozo, quien se habría negado a viajar a la capital provincial argumentando no tener las garantías de seguridad suficiente, a pesar de que Santibañez le ofreció una custodia policial.
Suspenden asamblea
Retamozo no respondió ayer los llamados telefónicos de este Diario, pero sí lo hizo Ricardo Garrido, otro miembro de comisión disidente, quien reveló que por la tarde hubo otra reunión de delegados en Pico Truncado, resolviéndose continuar con la medida de fuerza con las consecuentes “vigilias” en las rutas.
No obstante, Garrido confirmó que por ahora quedaba sin efecto una nueva asamblea general de afiliados que inicialmente estaba previsto para hoy en el acceso a Cañadón Seco, en la cual Retamozo había anticipado que “los compañeros” iban a pedir al secretario general Héctor Segovia que diera un paso al costado.
Garrido respondió con evasivas cuando se le consultó si delegados u otros trabajadores de base habían recibido telegramas de intimación o de despido, señalando que si los hubo ellos no tenían demasiada importancia, argumentando que solo responderían a una formalidad empresaria.
El dirigente también optó por mantener en reserva algunas cuestiones de último momento que surgieron en las tratativas que ese grupo está realizando por cuenta propia con referentes de las cámaras empresarias, aunque al promediar la tarde trascendió que Retamozo viajaría hoy a Buenos Aires para mantener un diálogo directo con los mismos.
Fantasmas de telegramas
A todo esto, voceros vinculados a las áreas de relaciones públicas de las operadoras de yacimientos, es decir YPF, Pan American Energy y Sinopec Argentina (ex Oxy) negaron que ya hayan comenzado a enviar telegramas de intimación o de despido a los huelguistas.
“Esa es solo una posibilidad que está en una etapa de evaluación”, reveló un vocero de YPF desde las oficinas centrales en Capital Federal.
(El Patagónico)
