Estiman que la inversión bruta interna ascendió a U$S 8.479 millones

En términos de volumen físico, la IBIF creció 6,7% interanual. De este modo, la participación de la inversión en el PBI a precios constantes ronda el 23,5%, medido sin estacionalidad. La demanda de construcción aumentó…

viernes 23/12/2011 - 9:30
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En términos de volumen físico, la IBIF creció 6,7% interanual. De este modo, la participación de la inversión en el PBI a precios constantes ronda el 23,5%, medido sin estacionalidad. La demanda de construcción aumentó más que la de maquinarias y equipo de transporte.

Se mantuvo a tono con el nivel medio del tercer trimestre, en valores nominales en dólares, aunque redujo levemente su participación en el PBI, señaló Infobae.com.

En términos interanuales, la inversión en construcciones registró en noviembre una suba del 7,7%. En términos desestacionalizados, se observó un aumento del 1,0% respecto de octubre.

La inversión en maquinaria y equipo dejó de ser el rubro de mayor crecimiento dentro de la inversión, habiéndose expandido 5,5% anual, en la medición de la consultora Orlando Ferreres.

«Las restricciones a las importaciones han afectado el desempeño de la inversión en equipo, cuya evolución registró una marcada desaceleración, registrando una expansión del 9,1% anual, la más baja de los últimos 16 meses», sostiene el estudio privado. Por su parte, la inversión en equipo nacional evidenció una merma del 2,1% anual.

Concluye el informe que «la expansión de la actividad económica y la apreciación cambiaria que hace más barata la compra de maquinaria y equipo extranjero han dinamizado la inversión este año a través de la incorporación de maquinaria y equipo importado. Sin embargo, las cada vez mayores restricciones a las importaciones impiden que éste siga siendo el factor que impulse la inversión».

Traba a las compras foráneas

La exigencia de informar con 10 días de anticipación -en lugar de 5 días-  la compra de divisas, aunque sea para compra de máquinas y equipos o de insumos y partes para el proceso productivo que no se producen en el país, generó un cambio sustancial.

«No se trata de una demora inicial de 5 días que se diluye en el tiempo, al comenzar a rodar la rueda, sino que puede ser sustancialmente mayor, porque, en caso de rechazo por parte de la autoridad de aplicación, deberán dejarse pasar diez días más hasta la próxima presentación. Esta es una limitación grave para industrias que operan con el régimen just in time», dijo a Infobae un fabricante de automotores.

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