Así lo aseguró el embajador argentino ante la ONU, Jorge Argüello, al evaluar la participación del país en la Asamblea General. Destacó que Argentina no sólo demostró ser “un jugador activo del G20 con propuestas propias y concretas” sino que mañana será designada para presidir el G77 más China, “el principal bloque negociador de la ONU».
“La expectativa que existe que Argentina pueda cumplir un rol de puente entre el G20 –esos 20 países que reúnen el del 85% del PBI mundial- y el resto del mundo en desarrollo que está buscando una manera concreta de participar del nuevo sistema de toma de decisiones” de las Naciones Unidas, dijo en diálogo con La Red.
Para Argüello, el de mañana será “un día muy importante para la Argentina” en virtud de esta elección de la presidencia del G77 más China, que recaerá sobre Argentina “entendemos que por el concurso unánime de los 132 países miembros del bloque”.
Por otro lado, el funcionario ponderó el discurso ofrecido por la Presidenta el viernes ante la Asamblea de la ONU, donde la mandataria “abordó todos los temas de fondo que hacen a la política internacional, obviamente con una visión Argentina, latinoamericana”.
En particular sobre la propuesta para que los iraníes requeridos por la Argentina sean juzgados en un tercer país que garantice la imparcialidad reclamada por Irán, Argüello consideró que “el margen de resistencia para cumplir con la ley se le va achicando a partir de esta propuesta al régimen de Irán”.
“Nosotros estamos procurando que se pueda avanzar con el proceso judicial, pedimos al gobierno de Irán que permita que los ex funcionados los acusados de haber tenido participación directa en el atentado a la AMIA, sean juzgados. En ese sentido la Presidenta ha presentado una propuesta audaz, teniendo en cuente que desde hace años el gobierno viene pidiendo que Irán entregue a esos funcionarios y ex funcionarios que tienen pedido de captura internacional de Interpol. Y no los entrega diciendo que en Argentina no habría imparcialidad suficiente para juzgar a estos hombres, lo cual es claramente una excusa dilatoria”, dijo.
“Entonces la presidenta dice ‘bueno, nosotros vamos a mantener la acusación y le proponemos a Irán que nos pongamos de acuerdo en un país que a ellos les dé más garantías, nosotros podremos la fiscalía -que está llevada delante de una manera muy eficiente el fiscal Nisman-, Irán pondrá la defensa y el tercer país acordado en el marco de la propuesta de la presidenta con Irán, será el responsable de emitir el veredicto”, relató.
Argüello aceptó además, que como “no hay casi antecedentes respecto de un tercer estado como sede juzgadora de criminales que pertenecen a un estado distinto del que acusa”, es correcto decir que “se está haciendo camino al andar” en cuando a la definición de las modalidades del proceso.
“La propuesta fue más que bienvenida por la comunidad internacional porque muestra claramente que no hay ánimo de castigo sino de justicia”, agregó.
(Télam)
