El pollo registró un aumento del 60% desde enero y la caída del consumo ya es un hecho

«Todo apunta a las compras mínimas, ya no se hacen las semanales».

jueves 30/03/2023 - 11:49
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La hiperinflación, sumada al actual contexto de la gripe aviar, desató que el costo de una de las comidas más accesibles para los argentinos sea cada vez más alto, y por ende, que menos clientes opten no solo por los mejores cortes, sino también por la compra mínima y «para el día».

Esta mañana en el móvil de La Petrolera 89.3, el recorrido apuntó a una reconocida pollería de avenida Kennedy que dejó a la vista el panorama actual. Mercedes, su dueña, comentó cómo se vive actualmente este momento que va en efecto dominó hacia distintos alimentos.

«El aumento desde enero hasta la fecha ha sido bastante, más de un 60% y las ventas han bajado. Por la gripe aviar, tuvieron que sacrificar muchas aves y gallinas y eso generó que haya menos cantidad«, analizó la titular del comercio presentando su preocupación.

En este contexto, brindó algunos números acerca de el valor y comparación de un cajón de pollos. De forma directa, expresó que en enero costaba cerca de siete mil pesos, mientras que en los últimos días de marzo se mantiene en 13 mil, casi el doble. En tanto, en los mismos periodos presentados anteriormente, el kilo rondaba los 600$ y ahora trepó a los 900$. «La gente termina optando por comprar trozos», añadió.

A su vez, también manifestó el costo del maple de huevo, otro de los dolores de bolsillo que sufre la gente a la hora de hacer sus compras. «Hoy tiene un valor de 1900$ el más grande, mientras que el más chico 1600$«, señaló.

En diálogo con sus clientes y también conociendo el gasto que hacen al arribar al local, Mercedes fue clara al comentar que optan por llevar comida elaborada debido a que no tienen mucho tiempo para preparar la que viene cruda. Y por esto, la misma dueña asegura que no suben mucho los precios de esto porque podrían desplomarse las ventas. «Todo apunta a las compras mínimas, ya no se hacen las semanales«, lamentó.

«Ahora volvieron a llevar los espinazos y los menudos porque es lo más barato para consumir.
El kilo de conejo vale 2200$ y son productores de la zona autorizados a comercializarlo», concluye la comerciante de avenida Kennedy que sigue bien de cerca el aumento de la inflación.

En detalles, el kilo de pollo fresco en el local mencionado está en 990$, seguido por el pollo de granja que ronda los 1510$. No obstante, la gallina trepó a los 910 pesos. Continuando en esta línea y mencionando los trozos, el kilo de pata muslo subió a los 1090$, acompañado por la pechuga con hueso en 1450$ y la misma, pero deshuesada, en 1790$.

Con las opciones más económicas, los espinazos aparecen en 300$ exactos, las alas con esto incluido en 490$ y ya las alas solas en 990$. Volviendo a lo más barato, los menudos igualan el precio del espinazo y se transforman en lo más accesible para el día a día.

Apuntando a lo más «caro», el kilo de milanesas de pollo subió a los casi dos mil pesos, casi 400 pesos más se ubican las milanesas rellenas al igual que los muslos.

Los arrollados, probablemente lo más elegido por la gente de los barrios aledaños, treparon a 2490$.

En definitiva, si comer carne resulta ser una piña al bolsillo, lo que está siguiendo sus pasos es el valor del pollo en su totalidad y sobre todo en los cortes que antes solían ser accesibles para la comunidad.

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