El Xeneize obtuvo su estrella N° 72 y se produjo un curioso momento con dos autoridades del encuentro como protagonistas.
Promediando el primer tiempo, Darío Benedetto metía el primer gol del partido con un derechazo colocado al segundo palo que fue celebrado por toda la parcialidad Xeneize. Sin embargo, el grito fue ahogado por la bandera en alto del juez de línea que decretaba que había offside y el tanto era anulado.
A primera vista, el 9 de Boca estaba un pie y medio fuera de juego y el gol estaba bien anulado a instancias de Diego Bonfa.
Tras varios minutos de tensión en la cancha y la cabina del VAR donde Mauro Vigliano definía si había posición adelantada, llegó la confirmación: era offside de Benedetto y el tanto estaba bien invalidado.
Las cámaras de la señal TNT Sports captaron el momento en que el juez de línea, Diego Bonfa, celebraba su buena decisión mirando al cielo. Mientras tanto, Darío Herrera, árbitro principal del encuentro, lo arengaba desde el verde césped.
Se trata de una imagen inédita en el fútbol argentino, dado que no es corriente que un árbitro y un juez de línea celebren juntos un fallo correcto.
