El drama de alquilar: el que logra encontrar una propiedad debe pagar hasta cuatro meses como costos de ingreso

Los costos que demandan acceder a un alquiler son cada vez más altos y difíciles de afrontar para los inquilinos. Incluso, se registraron casos en los que el monto inicial del contrato para ingresar llega a cuadruplicar el valor mensual de la renta.

miércoles 02/08/2023 - 10:46
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No solo es caro alquilar, sino también se le suman los gastos que se requieren para firmar un nuevo contrato por tres años, bajo la actual Ley de Alquileres, indica Infobae.

Por ejemplo, si se hiciera un acuerdo por el pago de un departamento de tres ambientes por $200.000 mensuales, e incluye garantía propietaria, demandaría unos $415.000 en total incluyendo el primer mes de alquiler o mes adelantado como se le suele llamar, un mes de depósito y los informes del Registro de la Propiedad de Inmueble (RPI) de la garantía ofrecida.

En caso certificar las firmas por escribano (operatoria habitual, pero no obligatoria) se deben adicionar unos $6.000 por cada firma (inquilinos y garantes).

Igualmente, los expertos sostienen que el primer problema es la garantía. Es verdad que el uso de seguros de caución y fianzas creció mucho en los últimos años e incluso, se hacen más contratos con esa operatoria que con garantía propietaria.

Y otro gran problema, es la escasez de la orfera: en casi toda la Argentina no se consiguen alquileres permanentes.

“La oferta es inexistente y otro gran problema es que los propietarios comenzaron a exigir a los inquilinos condiciones contrarias a la ley, por ejemplo, precios fijados en dólares o que el contrato sea por dos años y que la actualización no sea cada 12 meses sino cada 3 meses”, indicó el presidente de la Cámara de Empresas de Servicios Inmobiliarios, Mariano García Malbrán.

Y continuó: “Aquí cabe recalcar que el principio de autonomía de la voluntad de las partes no es ilimitado, y casualmente estos dos aspectos son de orden público por lo que fijar cláusulas de este tipo, en el hipotético caso que exista un conflicto judicial, los fallos le darán la razón al inquilino y es un riesgo que los propietarios deben conocer y asumir”.

Por su parte, hay inquilinos que por no poder pagar la cuota o porque se les terminó el contrato y no disponen de todo el dinero para ingresar a una nueva vivienda, debieron mudarse con sus padres (jóvenes solos o parejas sin hijos) o jubilados que debieron alejarse de donde vivían a zonas más económicas para pagar menos por mes.

Magalí Zirulnikoff, cofundadora de la Comunidad Federal Inquilina y No Propietaria, indicó que “el problema es que muchas inmobiliarias, piden comisiones altas por adelantado y exclusivamente a la parte inquilina. Aún no se adecuó la ley que dice que la comisión la debe abonar el inquilino: su redacción es confusa y da lugar a la especulación”.

Además, hay casos donde los inquilinos lograron extender el plazo del alquiler hasta que puedan conseguir otra vivienda, modalidad que se propagó en Argentina por el rechazo de los dueños a seguir alquilando inmuebles bajo la actual Ley de Alquileres.

“Con los salarios actuales devaluados es imposible pagar lo que quiere el sector. Muchas personas están endeudadas desde la pandemia y no pueden salir. Hace tiempo la población inquilina de todo el país viene mudándose a lugares más chicos, más lejos, a la casa de algún familiar o con amistades, entre otras opciones. Hacen grandes sacrificios para trabajar todos los días y no vivir en la calle”, concluyó Ana Fernández Borsot, también de la Comunidad Federal Inquilina y No Propietaria.

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