El bloque PJ ya analiza el Código Urbano

Así lo informó Guillermo Almirón, al indicar que se busca avanzar sobre la ordenanza marco para el uso de la tierra en la ciudad, de modo que pueda ser sancionada en el actual período legislativo….

martes 10/08/2010 - 0:11
Compartí esta noticia

Así lo informó Guillermo Almirón, al indicar que se busca avanzar sobre la ordenanza marco para el uso de la tierra en la ciudad, de modo que pueda ser sancionada en el actual período legislativo.

El crecimiento de Comodoro requiere de reglas claras que podrían plasmarse en la redacción de un código urbano.

El concejal justicialista Guillermo Almirón recordó ayer que la redacción y trabajo previos del código urbano habían sido eje central en el inicio de la gestión. También sostuvo que el crecimiento de la ciudad, enfático en los últimos años, ha demostrado que si bien el municipio entregó más de 3.000 lotes la cifra se considera insuficiente en base a faltas de planificación claras.

“La legislación no actualizada se hace inflexible ante la demanda y la realidad que es mucho más incisiva”, destacó al sostener que el código urbano pondrá ese orden y permitirá el crecimiento ordenado a futuro, en función de que el objetivo primario de la herramienta es la delimitación  del uso de la tierra en Comodoro, incorporando además a éste toda la zona norte, históricamente gerenciada por las operadoras petroleras asentadas en el sector, y con YPF como paradigma.

El ex secretario de Gobierno informó que el análisis legislativo de la normativa incluye un cronograma de reuniones internas para la exposición de criterios, y también recorridas en la ciudad, subrayando que determinados sectores requieren la presencia in situ.

Sobre tal punto, explicó que si bien la demarcación de usos propuesta en el envío del Ejecutivo no resulta arbitraria, deben analizarse todas las situaciones debido al impacto de la norma sobre el costo del impuesto inmobiliario; el uso existente en la actualidad,  dado que podría darse la convivencia entre el residencial y el productivo que podría generar controversia o conflicto de intereses en los sectores a urbanizar.

“De hecho, la práctica indica que donde se ha avanzado sin legislación sobre tales áreas, se producen malestares entre los mismos vecinos porque existen urbanizaciones junto a productores porcinos”, ejemplificó detallando factores del orden de la convivencia o los costos del impuesto inmobiliario que había mencionado como factores de estudio.

Agregó que las zonas de demarcación productiva suelen  ser de mayores dimensiones y que de convertir dichos sectores al uso urbano, hay que contemplar la existencia de ordenanzas previas  -las de adjudicación- que prohíben su fraccionamiento y venta, y que de incorporarse como zona urbana también existen prohibiciones de uso. Hay que ir acomodando todos esos cambios de forma planificada” explicó.

GRANDES SUPERFICIES COMERCIALES

Como se ha hecho notable en la ciudad, el desembarco de grandes superficies comerciales trae aparejado un importante impacto en la consolidación urbanística del sector en que se instalan. Consultado respecto si el código las admite en todos los sectores del ejido o sólo en ciertas franjas, Almirón recordó la modificación efectuada en 2009 dejando atrás las restricciones de uso, y que la misma está incorporada de hecho al código.

“El código incorpora esa liberación pero  no es algo  que esté absolutamente definido y lo tenemos en tratamiento” agregó, destacando que el envío del Ejecutivo es una propuesta integral redactada a conciencia y que no se trata de un mero borrador, aunque reiteró que el eje en cuestión será definido por el cuerpo, de modo que no puede anticiparse cuál será el criterio.

“Lo primordial es el uso residencial”, subrayó como contrapartida al reconocer que las demandas prioritarias de tierras son para viviendas familiares.

Fuente: el patagónico

Compartí esta noticia