(Por el Contador César Herrera)
El “veranito” del fin de semana Comodorense conspira contra la posibilidad de dedicar más tiempo a la lectura y a la escritura, aún así intentamos exponer opinión sobre los temas cotidianos, aportando una mirada y publicando en las redes sociales.
La RESPONSABILIDAD califica la capacidad de responder por la consecuencia de nuestras propias acciones. El origen de la palabra esta en el verbo latino responderé, que significa “responder”, “contestar”. Todo lo que hacemos tiene un efecto, No hay acciones sin consecuencias.
¿Qué ocurre cuando alguien no asume la consecuencia de sus acciones? ¿Desaparecen las consecuencias, se pierden en el vacío, dejan de tener vigencia? No. Están allí y afectan siempre a alguien. Y no solamente eso. A su manera las consecuencias piden que haya alguien que responda.
Lamentablemente abundan las personas que no lo hacen, que eluden su responsabilidad y que se han hecho expertas en el dudoso arte de convertir las consecuencias de sus propias acciones en la culpa de los otros.
Es por ello que la solicitada del Partido Justicialista – Modelo Chubut titulada la reparación del daño comienza con la verdad y afirma que:
“La nueva etapa que se inicia en la política de Chubut comienza con la necesidad de reafirmar por parte del conjunto de las fuerzas políticas un compromiso explícito con respeto a la legalidad y a las instituciones. Será tarea de todos, sin excepción, trabajar responsablemente para reparar el daño institucional producido como consecuencia de denuncias bochornosas que enturbiaron el proceso electoral.”
Analicemos la IRRESPONSABILIDAD del Modelo Chubut al no hacerse cargo de sus acciones, al trasladar a todos las consecuencias de sus actos y al instarnos a tomar como válida su verdad (“La reparación del daño producido no puede comenzar sino con la verdad”).
La falta de recursos financieros y humanos, la improvisación del Tribunal Electoral Provincial integrado por representantes de la Justica, del Procurador General y Representantes del Poder Legislativo, designados a propuesta o militantes del Modelo Chubut y fundamentalmente la carencia de información sobre los resultados en una elección que se vaticinaba reñida, generaron la desconfianza y el descrédito en todo el país y fuera de nuestro país.
Párrafo aparte de la otra cara de la misma moneda, el FPV, que con tal de lograr horadar la candidatura de Mario DN lanzaron con todo el potencial que disponen una campaña que ya dejó definitivamente instalada la idea del fraude y con ello la legitimidad de las próximas autoridades provinciales, cualquiera sea la fórmula electa.
El daño producido por el modelo Chubut y el FPV a las instituciones y a la credibilidad de los Comicios del 20 de Marzo de 2011, desde su convocatoria anticipada, la obscena utilización de los recursos públicos y privados en la campaña, la discriminación hacia las demás fuerzas políticas, etc., etc. Tuvieron su epicentro en los días posteriores al acto electoral, pero la semilla ya había sido plantada muchos años antes con la utilización soberbia y mesiánica del poder y sigue en el presente pidiendo que todos paguemos por sus “errores”.
