Este viernes se conoció el resultado de un informe realizado por Gett, una empresa dedicada a la investigación de mercados que analiza la experiencia que tienen los consumidores en un negocio. El listado publicado posicionó a Chubut como la provincia con la peor atención al cliente de todo el país.
La investigación se basó en el relevamiento de cámaras de más de siete mil tiendas de diferentes industrias en toda la Argentina, con las que se obtuvieron videos bajo la modalidad de “consumidor incógnito”. Es decir, que una persona se hacía pasar por un cliente mientras filmaba toda la experiencia con una cámara oculta.
De esta manera, se evalúan las estrategias de atracción del turismo de cada zona como también la calidad de la atención que se le ofrece al consumidor. Para eso, se toman en cuenta las buenas prácticas que miden las experiencias de compra y el grado de satisfacción de cada cliente al finalizar las mismas.
El ranking mencionado evidenció que en Chubut se cumplen un promedio del 71,24 de estas normas, lo que la posiciona como la provincia con la peor experiencia de compras de todo el país. Los últimos lugares también los ocupan Córdoba con un porcentaje del 72,32 y Tierra del Fuego con un 73,86 %.
Por otro lado, encabezando el podio de las provincias que sobresalen en el servicio al cliente está Catamarca con un 86,09 %, Mendoza con un 83,99 % y Jujuy con un 81,80 %.
En detalle, el análisis realizado consideró desde el primer contacto que tenían los clientes con cada comercio (como el saludo de bienvenida) hasta la presentación detallada de productos, técnicas de ventas y asesoramiento en la compra.
Otro dato interesante de este informe reafirmó que, para los consumidores, la cordialidad y autenticidad con las que son recibidos en un comercio son las bases fundamentales sobre las que se desarrollara el resto de la interacción con los vendedores, como también el análisis de la calidad de la experiencia.
Las habilidades comerciales del personal y la claridad en la comunicación fueron también claves para determinar si un establecimiento ofrecía una grata atención a sus clientes o no.
