Rosario Central venció por la mínima a Peñaron en el debut de ambos en la actual edición de la Copa Libertadores.
Pese al golazo de Quintana que le dio los 3 puntos al Canalla en el Gigante de Arroyito, la fiesta se vio empañada nuevamente por la violencia en las tribunas.
Antes del inicio del partido, la parcialidad de Peñarol arrojó una bomba de estruendo a la tribuna superior a la que estaban colocados, y como respuesta los hinchas locales arrojaron vallas que hirieron al menos a un espectador.
Luego de finalizado el encuentro, cuando los jugadores uruguayos fueron a saludar a su gente, hinchas de Central arrojaron proyectiles hiriendo a Olivera en su rostro.
La sangre brotaba de su pómulo izquierdo y abandonó el campo de juego escoltado por sus compañeros. Ya en el vestuario, versiones indican que se habría desvanecido. Luego fue trasladado a un hospital rosarino donde recibió dos puntos de sutura por el corte.
Debido a los incidentes, ambos equipos están sujetos a sanciones, aunque la a priori la peor parte se la llevaría Central por los hinchas y el jugador de Peñarol herido.
Si bien no se sabe la sanción que recibiría el equipo rosarino, la CONMEBOL podría darle por perdido el encuentro, descontarle puntos y suspender el Gigante de Arroyito por lo ocurrido en la noche de este jueves.
