Martín Buzzi retomó ayer sus funciones como intendente de Comodoro Rivadavia, remarcando su desacuerdo con que se convoque a una elección complementaria para establecer en forma clara quién será el próximo gobernador de Chubut.
Para Martín Buzzi, la convocatoria a elecciones complementarias en aquellas mesas que fueron anuladas “lleva una intención política manifiesta”, por lo cual no está de acuerdo en que las casi 2.000 personas involucradas vuelvan a votar. No obstante, aclaró que aceptará la decisión que adopte la Justicia respecto de este pedido hecho por el Frente Para la Victoria que busca subsanar parte de las múltiples irregularidades detectadas luego de las elecciones que se celebraron en Chubut hace 13 días.
Es que quien fuera candidato a gobernador por el Peronismo Federal entiende que de avanzar en este camino de nuevas elecciones conjuntas con las presidenciables del mes de octubre, “se manosea la voluntad de la gente, emitida el 20 de marzo”.
Sin embargo, Buzzi sí reconoció que existieron “errores formales” en algunas mesas, los que atribuyó a “la inexperiencia de los convocados como presidente y suplente de mesa”.
También sorprendió al asegurar que “siempre” supo que la elección sería muy reñida y que por eso el procedimiento de recuento de votos duró 9 días. Es que durante el cierre de campaña había dicho que no iba a tener que contar los votos, sino que los iba a “pesar”. Ayer se basó en los 401 votos de diferencia para asegurar que ello “no le quita legitimidad al sistema porque en Argentina se gana o se pierde por un voto”. También dijo que existen 827 votos a favor de los diputados provinciales de la lista de Carlos Eliceche, en tanto recordó que sobre 1.133 urnas solo hubo 5 anuladas por documentación faltante, sin aclarar que solo se contaron todos los votos en un 10 por ciento de las mismas, de donde surgió que el domingo 20 a él le habían computado al menos 1.200 votos de más que los que arrojaron los datos parciales del escrutinio que terminó el jueves en la Legislatura provincial.
El autoproclamado ganador indicó además que desde su sector se apegarán al Estado de Derecho y defendió el proceso eleccionario al decir que “existe jurisprudencia en el país que dice que hay que preservar la voluntad ciudadana en las urnas”.
Criticó el manejo que se hizo del tema por parte de sus contrincantes en la elección, al decir que “hemos asistido a una campaña dura donde se pretendía deslegitimar el procedimiento”. A su criterio, además, hubo “una campaña de desprestigio”.
En otro orden, dejó entrever la posibilidad de que se convoque a los presidentes de mesa ante el Tribunal Electoral Provincial o al Superior Tribunal de Justicia para que den cuenta de cómo se hizo el traslado de las urnas.
“Se hizo un enorme daño al sistema”, afirmó, entendiendo que el bochorno cruzó las fronteras provinciales y “puso en peligro los 2 mil millones de dólares de inversión que recibe Chubut; y con estas acciones también se pone en juego el buen nombre de la Provincia”.
A todos los que son parte de este proceso que aún no concluye, les dijo: “nos vamos a seguir viendo la cara y bueno sería que acepten el resultado”.
(El Patagónico)
