Una maestra de jardín de infantes se llevó la sorpresa de su vida. Hugo preparó todo llevó flores, los anillos y Marlene dio el sí. Alumnos, maestros y padres los llenaron de aplausos.
En tiempos de pandemia, de incertidumbre, de crisis en varios frentes… el amor sigue dando buenas noticias. Hoy, en Roca (Río Negro), «a la vieja usanza» un joven bombero sorprendió a su enamorada, una docente, a la salida de la escuela en la que trabaja.
Hugo Lagos llegó temprano, cargando una enorme caja para sorprender «al amor de mi vida». Globos, flores, familiares y amigos: no faltó nada, describe La Mañana de Neuquén.
Otras maestras se convirtieron en «cómplices», llevaron a Marlene hasta el estacionamiento frente a la escuela y la sorpresa y las lágrimas, la dejaron sin palabras.
El joven «valiente» -que se llevó todos los aplausos de padres, chicos y maestros- se arrodilló, ella dio el esperado sí y por unos instantes, nadie se acordó del COVID y los ‘dolores de cabeza’ de cualquier día.
«Nos conocemos hace 5 años. Ella algo sabía porque veníamos hablando… pero nada concreto. Entonces encargué los anillos, llegaron y me decidí. ¿Qué voy a esperar?», contó el joven, quien también es chofer de grúas, nervioso antes del gran momento.
Así es que esperó, sonó el timbre de la salida escolar, y él, perfumado, bien peinado y ‘emperifollado’ para la ocasión especial, enfiló a paso firme y sorprendió a su novia, de rodillas.
El «sí» llegó acompañado de lágrimas y emoción.
