Un conocido comerciante resultó por tercera vez víctima de un asalto a mano armada y de la bronca e impotencia que exteriorizaba y dejaba entrever, apenas si aportó algunos datos al personal policial de la Seccional Tercera y de la Brigada de Investigaciones que se constituyeron en el lugar ya que señalaba que de nada serviría radicar la denuncia.
De acuerdo a lo que este medio pudo averiguar en el lugar, ocurrió alrededor de las 19:45 en el Multirubros y Rotisería «San Agustín», situado sobre la avenida Canadá esquina Carlos Gardel del barrio Pueyrredón y los tres delincuentes jóvenes que ingresaron abruptamente al lugar, lo hicieron con violencia y en contados minutos sin que, incluso, algunos de los cuatro empleados del lugar se percataran lo que sucedía.
Uno de ellos apuntó directamente con un arma de fuego al propietario -de apellido Amado- y le exigió la entrega del dinero de la caja registradora. Pese a que el hombre en ningún momento intentó resistirse y muy al contrario, mientras extraía el dinero procuraba calmarlos, recibió una violenta trompada que le dejó una secuela de hematoma en el ojo izquierdo.
Los delincuentes se alzaron con una suma no determinada de dinero y también el teléfono celular y escaparon ante la mirada azorada de una clienta y el hijo adulto del damnificado, en dirección a calle El Patagónico donde muy posiblemente los esperaba algún cómplice en vehículo.
Ni bien fueron alertados, en contados minutos arribaron al lugar varios móviles policiales de la Seccional Tercera y también gente de la Brigada de Investigaciones, aunque solo pudieron recabar algunos datos de las características físicas y vestimentas de los tres jóvenes delincuentes ya que el damnificado se habría negado en primera instancia a radicar denuncia, por considerar que era inútil y también perjudicial para su comercio y tampoco quiso la llegada de una ambulancia para su asistencia pese a que el golpe recibido fue violento y le dejó un hematoma importante en el ojo izquierdo.
Fuente: Diario Crónica
