A días del inicio formal de la temporada de verano, el sector turístico argentino empieza a perfilar expectativas para el trimestre alto. Aunque diciembre llega con señales más alentadoras que las de comienzos de año, el diagnóstico es coincidente: mejoraría el porcentaje de ocupación, pero el consumo permanecería en una meseta, sin repuntar.
Los datos del último fin de semana XXL por el Día de la Soberanía Nacional funcionaron como primer termómetro. De acuerdo con la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), 1.694.000 turistas se desplazaron por el país, 21% más que en el mismo feriado de 2024.
A esto se suma la particularidad del calendario: Navidad y Año Nuevo caerán un miércoles, lo que, según coinciden todos los consultados, desincentiva los viajes exclusivos para las fiestas y concentra la demanda en los fines de semana posteriores, publicó Ámbito.
