Durante el ingreso, se constató un estado general «muy deteriorado» de la sede y se encontraron elementos de asistencia social —como bolsas de carbón, kits escolares y zapatillas nuevas— retenidos bajo llave y no entregados a la comunidad.
González enfatizó que la vecinal debe ser un «nexo» entre el Estado y el vecino, no un espacio de decisión personal. La nueva comisión, que planea reunirse a las 17:00 para armar un cronograma de trabajo, ya inició los pasos legales.
La principal preocupación administrativa es la ausencia de los libros de actas y balances, por lo que presentarán una exposición policial y seguirán el proceso judicial para regularizar la situación legal y administrativa y así poder retomar la labor social.
“La persona que estaba anteriormente a mí presidiendo… se negaba a entregar las llaves, se negaba a abrir las puertas de la vecinal y tuvimos que llegar a esto para poder hacer conducción”, señaló González al aire por Radiocracia.
Y agregó que “se encontraron bolsas de carbón que mucha gente por ahí en el invierno capazmente la necesitaba, y no fueron entregadas, kits escolares, zapatillas nuevas en cajas…”.
“Una vecinal es un nexo entre los vecinos y el Estado. No somos dueños de nada, ni somos, no tenemos la autoridad para decidir a quién entregarle y a quién no”, enfatizó el dirigente barrial.
Asimismo, enumeró los pasos a seguir con el tema de la Justicia, “porque la escribana no constató que estén los libros de actas adentro de la vecinal, que es algo muy fundamental…”.
Finalmente, González expresó que “hoy nos juntaremos evaluaremos todas las condiciones que tenemos y ahí en base de eso armar un programa de trabajo para llegar al vecino lo más pronto posible”.
