Tal como lo habían hecho hace dos semanas en el Cementerio de los Elefantes, volvieron a igualaron sin goles, esta vez en la cancha del Tatengue. Otro 0-0 en el clásico de Santa Fe, que sigue sumando empates.
En el clásico de Santa Fe hubo empate. Uno más para esa interminable lista de pardas. Esta vez fue en la cancha de Unión, pero créame que no hubo diferencias en relación a lo que había pasado hace dos semanas en la de Colón: otro 0-0 aburrido, sin emociones, con pocas llegadas al arco, casi sin expectativa de gol.
Dentro de ese panorama negro, Colón fue un poquitito mejor. Aun con todos sus problemas a cuestas, apretó a un Tatengue que, a pesar de que los resultados sigan estando de su lado, en cuanto al juego viene en caída libre. Pero cuando realmente se le complicó fue a partir de los 13′ del segundo tiempo, con la expulsión de Brítez por doble amarilla. Claro, con uno menos se vio obligado a replegarse, cediéndole campo y pelota a un Sabalero necesitado de puntos para despegarse de Chicago (quedó a cinco) y escaparle de una vez por todas al fantasma del descenso.
Sin embargo, ni siquiera con el hombre de más pudo marcar la diferencia. Tuvo alguna que otra situación como para hacerlo, pero lejos estuvo de llevarse puesto al equipo de Madelón. Entonces el resultado no se movió. Otra vez empate. Otra vez en cero.
