Un vecino comodorense sufrió un accidente de película el pasado fin de semana cuando cortaba leña.
En un momento dado, una madera con dos clavos de grandes dimensiones terminó directo en su rostro.
Los dos clavos terminaron hincados en su cara y su familia horrorizada debió trasladarlo al hospital llevando la madera consigo.
La familia contó que ocurrió «separando y cortando leña para la salamandra». En diálogo con El Comodorense, aseguraron que fue «un accidente que podría haber sido fatal».
Sin embargo, el hombre se recupera favorablemente gracias a que los clavos no alcanzaron los ojos, nariz, boca ni ningún órgano. «Hoy nos reímos», detallaron aliviados, incluso «la madera está guardada de recuerdo».
