Ayer el gobernador santacruceño puso en funciones a tres nuevos ministros de su gabinete. Procuró mostrarse firme y dio a entender que no cederá en su gestión, aunque muchos de los partidarios del propio oficialismo le hayan quitado su apoyo.
Elsa Beatriz Capuchinelli como titular de la cartera de Desarrollo Social; Claudio Alejandro Pesce en la Secretaría General de la Gobernación y Rafael Gilmartin en Producción, prestaron el juramento de Ley ante la Biblia.
La primera de ellas lo hizo ad-honorem “por mi querida provincia de Santa Cruz, Pesce “por los compañeros que están y los que no están”, en tanto que Gilmartin solo se limitó a jurar “por la Patria y los Santos Evangelios”, informó el Diario Patagónico.
La sonrisa de la mayoría de los funcionarios, sumado al despliegue de algunas banderas y el sonido de redoblantes, creaba un cuadro ideal, aunque el acto era el resultado de una crisis institucional que se había desatado hace una semana por los serios incidentes en la Legislatura, con un saldo de decenas de policías y trabajadores estatales heridos, seguido de la sucesión de renuncias en el gabinete.
Había gran expectativa por el discurso que pronunciaría el mandatario santacruceño, quien no se había mostrado en público desde aquellos tristes episodios que cobraron notoriedad nacional y hasta gestaron versiones sobre su renuncia al fracasar el tratamiento legislativo de sus proyectos para la “superación de la situación de emergencia económica y reordenamiento del Estado”.
La apertura de su mensaje fue un agradecimiento a Dios por el resultado de la intervención quirúrgica a que fue sometida la presidente de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.
Inmediatamente después dijo que era consciente de la crisis que afronta el Estado Provincial, la cual “va a necesitar de la compresión y del aporte de todos, pero la vamos a enfrentar porque hubo decisiones que fueron públicas”, en clara alusión al decreto que había emitido el día anterior, el cual contempla un paquete de medidas para contener el gasto y optimizar los recursos.
Asimismo se mostró esperanzado que en el inicio de las sesiones ordinarias, la Legislatura apruebe otras herramientas que le permitan “poder establecer un mecanismo que garantice que vayamos estabilizando y ordenando el cambio público del Estado”.
Pero al margen de ello, dijo que cuando se refería a la participación de todos los sectores, hacía alusión a los sociales, sindicales, políticos y económicos y que el principal esfuerzo lo tendrán que hacer “aquellos que más tienen” para volcarlos “en los que menos tienen”.
En ese contexto, sostuvo que “uno de los problemas que debemos afrontar y encarar con absoluta premura y certeza, es la salud pública de los santacruceños y también el de la seguridad” a través de distintas medidas de contención, habida cuenta de la asimetría que tiene la provincia.
Asimismo, instó a algunos sectores que hoy tienen un gran poder económico a pensar que “es el momento de devolverle al Estado lo que el Estado siempre les dio”, ya que progresaron gracias a la renta del mismo.
A modo de ejemplo, hizo referencia al corte de servicios por parte de farmacias y médicos a la Caja de Servicios Sociales, lo que le llevó a decir que “es incomprensible que hayan prestadores que no entiendan la situación y que antes de dialogar corten los servicios, como el de salud.
“Nosotros, bajo la modalidad de corte y extorsión no dialogamos y no pagamos. Vamos a pagar cuando se garantice salud para los santacruceños”, aseveró.
“Acá los que ganan tienen que poner y es el momento de empezar a aplicar un control muy fuerte”, dijo Peralta añadiendo a su lista a las empresas petroleras, a las mineras y a los casinos.
Con todo, tuvo que reconocer que el futuro político y económico se avizora como “muy complicado”, rematando con un tiro por elevación a diputados, funcionarios y dirigentes de su propio partido que le quitaron el apoyo, sobre todo del sector de “La Cámpora”, aunque en rigor no citó nombres.
En ese sentido afirmó que “no voy a perder un solo minuto en pelearme con nadie en especial y en particular. Que me quiten los apoyos que quieran y crean necesarios, pero yo estoy parado acá porque fue el pueblo el que me dio el suyo con su voto”.
