Un cambio de tendencia empieza a tomar forma entre los profesionales argentinos que se desarrollan en el exterior. Cada vez más ejecutivos con experiencia internacional comienzan a mirar hacia su país de origen con la intención de regresar y aprovechar un escenario que, para muchos, se presenta más estable y prometedor que en años anteriores.
Según un reciente informe de la consultora High Flow, especializada en búsqueda de talentos y headhunting estratégico, uno de cada cuatro profesionales que se contacta con la firma desde el extranjero lo hace con la idea concreta de volver a trabajar en Argentina. Estados Unidos, España y algunos países de América Latina son los principales puntos de origen de quienes protagonizan esta incipiente ola de retorno.
El relevamiento también indica que un 20% de los argentinos que emigraron en los últimos cinco años se encuentra actualmente en búsqueda activa de oportunidades laborales dentro del país. A esto se suma un dato llamativo: el 59,2% de los consultados planea regresar en algún momento, y el 60% asegura conocer a otro compatriota que también evalúa esa posibilidad.
Factores que motivan el regreso
Las razones detrás de esta tendencia son variadas. Por un lado, el deseo de reencontrarse con la familia y reconstruir la vida afectiva en el entorno local sigue siendo una de las principales motivaciones. Pero también pesan factores económicos y profesionales: nuevas oportunidades en sectores clave como energía, tecnología y servicios financieros, sumadas a políticas que apuntan a facilitar la reinserción de talentos repatriados.
A diferencia de lo que ocurría en años anteriores, cuando la salida del país era vista como una decisión sin retorno, hoy hay un cambio de mentalidad: el regreso ya no se percibe como un paso atrás, sino como una jugada estratégica en un contexto que comienza a ofrecer señales de recuperación y proyección.
