Con un gol de Santiago Silva, el conjunto de Guillermo Barros Schelotto se había puesto en ventaja, pero con los tantos de Diego Vera y Rodrigo Depetris, la «Crema» revirtió el marcador y lo ganó 2 a 1.
Luego de un ambiciosos debut ante Belgrano de Córdoba, Lanús viajó hasta Santa Fe con el objetivo de cosechar su segunda victoria y posicionarse como uno de los candidatos a quedarse con el título. Para ello, Guillermo Barros Schelotto volvió a apostar por un esquema muy ofensivo para el fútbol de estos días. La presencia de Santiago Silva, Silvio Romero y Lautaro Acosta eran argumentos suficientes para hacer temblar a cualquier defensa.
El partido comenzó trabado. Las faltas en la mitad de la cancha y los pelotazos constantes imposibilitaban las creaciones de situaciones riesgosas. Sin embargo, antes del primer cuarto de hora, en una jugada muy desprolija, Adrián Bastía recibió una infracción adentro del área que Juan Pablo Pompei ignoró. La pena máxima le hubiese permitido a Rafaela alcanzar el primer tanto del encuentro.
En el complemento llegaron las emociones. A los diez minutos, Santiago Silva empujó la pelota en las puertas del arco de Néstor Conde, para anotar el 1 a 0. Pero 60 segundos después, Diego Vera hizo reaccionar al equipo de Jorge Burruchaga y empardó las acciones. Con el 1 a 1 el cotejo seguía siendo abierto y el triunfo podía llegar para cualquier elenco.
El espectáculo era tan movido que no daba lugar a los cardíacos. Cuando Lanús parecía sacar una leve ventaja, Rodrigo Depetris aprovechó un rebote de Agustín Marchesín y marcó el 2 a 1. El conjunto santafesino lograba dar vuelta el marcador ante un rival que tenía serias aspiraciones a pelear el campeonato.
Pese a las buenas intenciones del “Granate”, manteniendo su fidelidad con el estilo que le quiere imponer el “Mellizo”, los bonaerenses no pudieron quebrar la resistencia que le propuso el elenco de “Burru”. El Torneo Inicial recién está amaneciendo, pero los tres puntos que consiguió Atlético Rafaela seguramente le servirán para comenzar a despegar de la zona baja, que lo viene aquejando hace un largo tiempo.
