Sucedió en Carnes Alvear, sobre barrio Pietrobelli y a plena luz del día. Tres amigos de lo ajeno y viejos pájaros de cuenta según las lides policiales, cometieron un violento asalto a mano armada a un conocido comercio que ya la semana anterior había sufrido este mismo problema.
Los delincuentes esgrimieron dos armas de fuego y un cuchillo y obligaron a los empleados del lugar -cajera y carnicero a quien le pegaron un culatazo en la cabeza para advertirle que no alertara a la policía- y junto a un hombre y una mujer que estaban de clientes, los obligaron a arrojarse al suelo para despojarlos de la recaudación diaria del comercio y de las pertenencias de uno de los clientes.
Según lo recabado por el diario Crónica, tanto en los escenarios de los hechos como en fuentes policiales de la Seccional Segunda que tomaron intervención en el hecho, este aconteció poco antes de las 19 en el local comercial “Carnes Alvear”, situado sobre la calle homónima 1.348 casi esquina Misiones, en barrio Pietrobelli. Los tres delincuentes ingresaron y mientras uno quedaba en la puerta otro se dirigió hacia donde se encontraba la señora encargada de la caja registradora y el tercer delincuente se mandó detrás del mostrador para exigirle al joven carnicero que se arrojara al piso y no intentara nada.
En tanto también obligaron a arrojarse al suelo a un joven cliente que andaba apurado con un hijo de corta edad para llevarlo a un tratamiento médico. A este último le sustrajeron dinero y su teléfono celular, en tanto vaciaron la caja registradora del comercio donde había una suma de entre 4.000 y 4.500 pesos.
Una vez perpetrado el atraco, los asaltantes huyeron hacia calle Misiones, doblaron por esta en dirección a calle Alem en dirección a la parte alta del barrio Pietrobelli, pero la rápida intervención de efectivos policiales de Seccional Segunda que andaban en el sector, permitió perseguir y aprehender al menos a dos de ellos, quien previamente intentaron deshacerse de un arma de fuego arrojándola a un cantero con plantas y un arma blanca con vaina de cuero que quedaron a la vista de ocasionales testigos.
En las detenciones también pudieron recuperar gran parte del botín que se encontraba en poder de los detenidos para quienes debieron apurar sus traslados a la comisaría de Rivadavia y Viamonte dado que desde la zona alta del barrio se vivía un clima tenso, y no fueron pocos los policías que fueron blanco de pedradas y hasta de algunos disparos que milagrosamente no dieron en sus humanidades, ni en la de alguna persona inocente y ajena a los hechos que por el horario, transitaban por dichas calles.
Posteriormente los detenidos serían identificados como Luis Gallardo y Facundo Marquez, ambos de 19 años y quedaron a disposición de la Fiscalía penal de turno.
