Como parte del plan integral de obras prioritarias que impulsa la actual gestión municipal, este jueves, el intendente Othar Macharashvili firmó un convenio con el gobernador Ignacio Torres para la construcción del conducto pluvial de descarga al mar, una obra fundamental para resolver los problemas de anegamiento en la zona sur de Comodoro Rivadavia.
La rúbrica fue acompañada el secretario de Infraestructura, Obras y Servicios Públicos, Fernando Ostoich; la subsecretaria de Infraestructura, Clarisa Mendez; el asesor letrado, Ezequiel Turienzo; y representantes vecinales de los barrios más afectados por el temporal de 2017, entre ellos Víctor Bonzano, de barrio Juan XXIII; Roberto García, del Abel Amaya; Dante Curruhuinca, del 30 Octubre; Dora Jérez, de barrio Moure; y Franco Gelmetti, del Pueyrredón.
Se trata de una intervención de gran envergadura técnica y estratégica, que se ejecutará junto al Gobierno Provincial, con una inversión estimada en 10 mil millones de pesos, y que permitirá el correcto escurrimiento de las aguas pluviales provenientes de las avenidas Roca y Chile, dando una respuesta estructural a una problemática histórica de la ciudad.

El intendente Othar Macharashvili destacó la relevancia de esta obra al decir que “es una obra que es necesaria e imprescindible para toda la zona, una respuesta concreta a un pedido que lleva años y ante el retiro del gobierno nacional, que suspendió las obras públicas, decidimos dar respuesta desde el Ejecutivo, porque Comodoro necesita infraestructura que dé respuesta a las necesidades de los vecinos”.
En esa línea, el jefe comunal consideró que “es una de las obras más importantes de la gestión, hoy tenemos un proyecto que está siendo revisado, conforme a las especificaciones que brinda. Pero va a ser un antes y un después para los vecinos de la zona sur”.
Por otra parte, Macharashvili agradeció “la participación de los vecinos que vienen trabajando en los barrios, mostrando cuáles son las necesidades y traccionando para ver cómo seguimos avanzando en aquellas obras que han quedado truncas”.

Más 1300 metros lineales y más de 4900 metros cúbicos de hormigón
El nuevo conducto pluvial principal de descarga al mar tendrá una longitud total de 1300 metros, iniciando desde la esquina de avenida Chile y avenida Roca, donde confluyen los colectores principales de ambas cuencas, y continuará a lo largo de La Nación, Francisco Behr y Casimiro Pella, hasta su desembocadura en la zona costera del barrio Stella Maris.
El diseño contempla una estructura de hormigón armado de gran porte, con secciones que van desde los 3,50 x 2,50 metros hasta los 3,50 x 2,90 metros, y pendientes adaptadas a cada tramo, que garantizan un flujo seguro y controlado del agua en todo su recorrido.
Además, se instalarán sumideros, cámaras de inspección, cámaras de empalme y una obra de desembocadura en el mar, acorde a los relevamientos técnicos y topográficos realizados, cumpliendo con los más altos estándares de ingeniería.
