Al menos ocho internos de la Alcaidía Policial de esta ciudad fueron trasladados anoche Hospital Zonal a raíz de haber sufrido principio de intoxicación por la quema de colchones en medio de un motín que se desató alrededor de las 19.30 luego de una huelga de hambre, diferencias entre ellos mismos y forcejeos con el personal de guardia.
El ingreso de los bomberos generó la histeria de numerosas mujeres familiares de los hombres que se encuentran privados de su libertad en el recinto ubicado en el barrio Unión, junto al edificio de la comisaría Seccional Segunda.
Las esposas, hermanas e hijas proferían gritos de insultos a los uniformados argumentando que los internos habían sido golpeados tanto en la noche del jueves como durante el momento en que se produjo la emergencia por la quema de colchones.
(El Patagónico)
