La vocera del gobierno lo había desafiado a que revele de qué manera obtiene sus ingresos, a lo que el diputado libertario le contestó y además aprovechó a criticarla por «actuar igual que Juntos por el Cambio».
En las últimas horas comenzó a circular un video de Gabriela Cerruti cuestionando la actividad del economista y legislador respecto de que, debido a que él dona su sueldo, no podría vivir dado que no tendría dinero. Ante esto, expresó lo siguiente: «Javier Milei dice que vive de su trabajo y yo me pregunto, ¿cuál es? Si él dona su sueldo de diputado, ¿de qué puede trabajar un diputado? Además de que no va a la Cámara».
Continuando con sus declaraciones hacia el precandidato a presidente, la vocera oficial del gobierno dijo: «al margen de eso, los diputados no pueden trabajar de cualquier cosa, la ley de ética pública dice que no puede trabajar para una empresa que tenga algún tipo de relación con el Estado. Todas tienen algo con el Estado porque regula, subsidia y hay algún conflicto de interés».
Y acusándolo de obtener su dinero por izquierda, Cerruti dijo que «es incompatible con la ley de ética pública». Y agregó: «este señor tal vez vive de la casta de los empresarios, de los ricos, de las multinacionales y de los todopoderosos».
Al conocer sus dichos y respondiéndole duramente, Milei durante su paso por La Nación + fue consultado sobre este tema y descargó: «ella dice que yo falto a la Cámara y solamente fue a una, entonces que no mienta. Hubo algunas sesiones que cayeron, pero de 16, estuve en 14. La gente de Juntos por el Cambio también instala esto y es la misma mentira».
Contestándole por su versión de que se vive ausentando en las comisiones de diputados, el libertario acusó tanto al oficialismo como a la oposición de bloquearle esta posibilidad diciendo que «hubo un acuerdo entre Cristian Ritondo y Máximo Kirchner para que no participemos de ninguna comisión».
Por último y presentando información clara sobre su vida y sus ingresos, Milei concluyó: «vivo de lo que viví siempre: de dar conferencias. ¿Quién va a pagar un mango para escuchar a Cerruti? Para que la escuchen tiene que pagar. En cambio a mí, me pagan y en dólares, no es poquito, son entre 10 mil y 25 mil. Escribo libros y la gente los compra porque son cosas interesantes», cerró, dejándole una chicana.
