Maurito fue dado de alta luego de “volver a nacer”

Mauro Padilla, el niño de 4 años que sobrevivió al choque frontal registrado el sábado 29 de enero pasado en el camino Roque González, donde fallecieron sus padres y su hermanita de 8 meses, fue…

miércoles 16/02/2011 - 9:33
Compartí esta noticia

Mauro Padilla, el niño de 4 años que sobrevivió al choque frontal registrado el sábado 29 de enero pasado en el camino Roque González, donde fallecieron sus padres y su hermanita de 8 meses, fue dado de alta ayer en el Hospital Regional, luego de casi tres semanas de intenso trabajo de los especialistas por salvarle la vida.

A Mauro le reconstruyeron la mitad de su rostro y ahora quedará provisoriamente al cuidado de sus tíos en Kilómetro 8.

Después de sobrevivir a la trágica experiencia que le toca afrontar, se puede decir que Mauro volvió a nacer. “Monito” o  “Chancho”, como lo apodaron los médicos del Hospital Regional, recuperó ayer el alta luego de 17 días de intensos cuidados.

Mauro Padilla, con tan sólo 4 años, enfrentó a la muerte con la ayuda de los médicos de terapia intensiva infantil del Hospital Regional y le ganó la partida. Su mirada temerosa, asustada todavía, fue capturada ayer por la cámara de Diario Patagónico en el momento en que recibió el alta. La sonrisa puede esperar, pero las ganas de vivir no.

Sobre las 15 de ayer salió por primera vez a la calle luego del accidente. Abrazado por su tío Fermín Martínez partía hacia Kilómetro 8 donde vivirá durante un tiempo, para luego reencontrarse seguramente con su abuela en Jujuy.

Compleja recuperación

Mauro recibió el alta médica luego que el doctor Fabián Nadini lo interviniera quirúrgicamente la semana pasada en la parte inferior de la cara, ya que sufrió una severa fractura del tercio medio inferior del rostro, con fractura de ambos maxilares, el superior y el inferior y la pérdida de varias piezas dentarias de leche, que recuperará con el tiempo.

Esas lesiones, según los especialistas fueron producto del fuerte impacto contra su rostro de algún fierro retorcido en el choque frontal ocurrido el 29 de enero, donde perdieron la vida sus padres y su hermanita de tan sólo ocho meses.

El estado de salud de “Monito” en los primeros días era de extrema gravedad ya que además registraba un fuerte golpe en el cráneo que le produjo un edema cerebral y pulmonar. En las primeras horas de terapia se temía lo peor, sólo un milagro podía salvarlo. Y ese milagro llegó, la ayuda también.

Incluso un fuerte golpe en un pulmón le provocó una neuropatía. Sin embargo, Mauro logró sobrellevar sus lesiones y los edemas hasta que finalmente la semana pasada le quitaron el respirador artificial.

Ayer todos los tíos de Mauro estaban en el Hospital Regional esperando abrazarlo y disfrutarlo, como su tío Fermín Martínez, su madrina Estela, sus tías Cinthia y Claudia, su vecina Nadia y muchas otras personas que estuvieron a su lado en las últimas semanas.

Ahora Mauro quedará provisoriamente al cuidado de sus tíos hasta tanto se resuelva la tutela definitiva por parte del Juzgado de Menores.

La semana que viene se le realizará una segunda operación en la mandíbula y comenzará un tratamiento psicológico y kinesiológico durante esta semana. Lo deben preparar para que el mensaje más duro: que sus padres y su hermanita ya no estarán más con él.

(El Patagónico)

Compartí esta noticia