Luis Advíncula dejó a Boca con diez hombres a los 25 segundos del partido ante Cruzeiro por la vuelta de los octavos de final de la Copa Sudamericana. La expulsión fue por una fuerte falta contra Lucas Romero.
Los equipos todavía no se habían acomodado dentro del campo de juego cuando llegó la primera polémica: Advíncula fue a marcar a Romero casi sobre la línea del lateral y terminó pisándole uno de los tobillos. Esto hizo que el árbitro colombiano Wilmar Roldán le mostrara inmediatamente la tarjeta roja al jugador de Boca.
La fuerte sanción motivó el reclamo vehemente de todos los futbolistas del Xeneize. El juez, que no recurrió al VAR para tomar la decisión, se mostró firme.
