Un profundo cambio se está dando en la dinámica del sistema bancario argentino: los bancos han reducido su exposición al Estado y redirigido su financiamiento hacia el sector privado. Según un informe de la consultora Quantum, la cartera de créditos al sector privado pasó del 31% al 58% en el último año, mientras que la participación del sector público cayó del 69% al 42%.
Este giro en la estrategia crediticia responde al nuevo escenario macroeconómico, marcado por el saneamiento del balance del Banco Central, la absorción de deuda por parte del Tesoro y el regreso del superávit fiscal, tanto primario como financiero.
“El crédito crece al 50% anual porque los bancos dejaron de prestarle al Estado y volvieron a financiar a familias y empresas”, afirmó Federico Furiase, director del Banco Central y representante del Ministerio de Economía. La afirmación se respalda en los datos: los préstamos al sector privado crecieron un 101% interanual en términos reales, mientras que los depósitos lo hicieron un 34% real anual.
Activos, pasivos y balances más equilibrados
El informe de Quantum también revela que el activo del sistema bancario creció un 14% real anual y ya representa el 30% del PBI. En tanto, el pasivo consolidado —principalmente compuesto por depósitos— aumentó un 17% real anual y equivale al 23% del PBI.
En ese contexto, se incrementaron tanto los depósitos en pesos como en dólares. Los depósitos en pesos —sobre todo los a plazo fijo— y los fondos de money market (que ya representan el 5% del PBI) impulsaron el crecimiento del pasivo. A su vez, los préstamos en dólares aumentaron 180% anual y ya representan el 7% del activo total.
Pese al fuerte crecimiento del crédito, la cartera irregular se mantiene baja y estable, en torno al 2% del total, y el patrimonio neto de los bancos aumentó un 5% real en el último año.
Menor exposición al BCRA y al Tesoro
El informe señala también que la sustitución de pasivos remunerados del BCRA por títulos del Tesoro (LEFIs) marca un cambio en la composición del activo bancario. Si bien la tenencia total de títulos del Tesoro creció 30% real, se redujo un 51% la participación de títulos en dólares, reflejando una menor exposición cambiaria.
En paralelo, los activos públicos y del Banco Central cayeron 34% en términos reales, perdiendo peso en el total de activos de los bancos.
Un sistema más sano y orientado al crédito productivo
Para Quantum, esta transformación responde a la mejora en la confianza macroeconómica y contractual, y marca un regreso a la función histórica del sistema bancario: intermediar el ahorro hacia la inversión y el consumo privado. “Los bancos, en su rol de bancos”, como titula el informe.
