Así lo estimó el viceintendente de Comodoro Rivadavia al referirse a los últimos hechos de inseguridad ocurridos en la ciudad, con dos muertes violentas y enfrentamientos entre familias antagónicas como el de las 1.311 viviendas, con casa incendiadas, tiroteos y otros tipos de agresión.
Carlos Linares sostuvo que lamentablemente este tipo de enfrentamientos entre grupos antagónicos es difícil pararlo si no hay un compromiso marcado desde la Justicia que acompañe lo que se hace a nivel del Ejecutivo.
En cuanto a quienes originan desmanes desmintió tener relación alguna con los supuestos agresores: “a veces me han involucrado en amparar grupos pero no tenemos nada que ver. Sí sé que hay alguien de apellido nieves trabajando para el municipio en planes sociales, pero nada más que eso. Que estén trabajando para el municipio no quiere decir que se lo ampare, no hay que buscar chivos expiatorios”, examinó.
Linares adujo que entiende que en la desesperación de los vecinos u ocasionales rivales de barrio se digan muchas cosas. “Pero desde el municipio jamás se amparó a alguien para que no sea detenido ni mucho menos”, aseguró, y agregó que “mal podríamos decir que se levantó el teléfono desde la Municipalidad para proteger a alguien, porque es justamente contra lo que estamos luchando, contra la violencia”.
Al retomar el lazo judicial de la cuestión, sostuvo que el poder que tiene la Justicia es independiente porque el organismo que la rige lo es, y agregó que no todos los jueces son malos, admitiendo que hay un tema social del que también deben hacerse cargo.
“Sin dudas que hay jueces mas garantistas que otros y ven el conflicto social de diferentes formas. Esto n oes privativo de Comodoro Rivadavia. Al contrario, es cuestión de debate permanente en el ámbito nacional”, consideró Linares en diálogo con El Comodorense Radio, que se emite por Radiocracia.
Y sostuvo que como municipio, como Estado, su función es la contención, llegar al barrio para que no haya enfrentamientos de esta naturaleza: “desde la Municipalidad acompañamos para indicarles el camino para que no vayan sus familias por caminos extremos”, indicó sobre el trabajo social diagramado a ese fin.
Recordó asimismo que el intendente Néstor Di Pierro se reunió el lunes con su gabinete, especialmente con la secretaria de Desarrollo Humano, Ana Llanos, para dotar de mayor presencia y más rápida respuesta a los casos urgentes.
Otros focos conclictivos
Al referirse al barrio 30 de octubre, donde en la víspera participó de un nuevo acto aniversario del lugar, estableció que “las 1.008 dentro de lo que se ve, están mucho más tranquilas que años atrás”.
En ese marco, recordó que tienen un plan para recuperar ediliciamente los módulos habitacionales porque “es un barrio que está muy caído en ese aspecto”, destacando la labor de muchos chicos como los de la agrupación de jóvenes que allí se conformó.
Por ese mismo motivo, lamentó que estos muchachos en otras oportunidades hayan sido usados varias veces desde el poder con fines que no les reportan nada en el aspecto social y sólo redundaban en intereses políticos.
“Conozco muy bien el barrio 30 de octubre y estoy convencido que lo podemos cambiar, entro mucha gente en últimos años y es difícil manejar ese movimiento, porque viene de un tema de desidia de hace muchos años, gente que no sabemos qué antecedentes tenia al llegar a la ciudad”, explicó Linares quien aseveró que están trabajando “porque hay gente que merece vivir mejor y no puede ser que un grupo minúsculo los tenga así, en vilo”, concluyó.
