Un clásico de verdadera alta tensión tuvo lugar en la Bombonera ayer, donde Boca Juniors no pudo con Racing y se despidió del Torneo Clausura. El clima fue de una final anticipada: ambos sabían que era el paso previo al duelo que se llevará a cabo el próximo sábado en Santiago del Estero contra el ganador del clásico platense que disputarán hoy Gimnasia y Estudiantes. Así lo entendió la gente local, con el extra de saber que enfrente estaba un equipo clásico al que siempre le quiere ganar, indica Infobae.
Por eso no fue raro que la silbatina fuera generalizada cuando los futbolistas visitantes saltaron al campo de juego de la Bombonera, con Marcos Rojo y Agustín Almendra a la cabeza. Hubo ciera indiferencia y hasta algunos aplausos aislados, en primera instancia, para el defensor. Para el mediocampista surgido en la cantera azul y oro sí existieron ademanes y reprobaciones de todo tipo desde el precalentamiento. A Rojo le obsequiaron una camiseta enmarcada por su paso en la institución, pero igualmente se fue silbado cuando se perdió en la manga luego de los ejercicios precompetitivos.
“Para ser campeón, hoy hay que ganar”, sonó antes del match desde los cuatro costados. La salida de los equipos emuló a la de los 90, al igual que en el cotejo anterior. Esta vez no hubo lluvia de papelitos, pero sí de serpentinas. También show de telones: una dedicada a Leandro Paredes y las tres que venían siendo cábala con la imagen de Diego Armando Maradona. En el campo de juego, un mensaje al resto: “El único grande”. Para el cierre, La 12 desplegó una bandera gigante histórica con el lema “podrán imitarnos, pero igualarnos jamás”.
Como el inicio del encuentro se demoró por la cantidad de serpentinas que seguían cayendo al césped desde las tres bandejas Sur, los hinchas aprovecharon para enfocarse en quien iba a dar el puntapié inicial: Agustín Almendra. “El que no salta, es un traidor”, le cantaron. En el banco de suplentes, Marcos Rojo se echó a reír.
EL MINUTO A MINUTO
7′ PT: El juego se detuvo varios minutos por una infracción de Maravilla Martínez a Ayrton Costa, que queda tendido en el piso. Prácticamente no se llegó a jugar y ni que hablar de situaciones de gol.
12′ PT: La gente se levanta por un caño de Zeballos y una recuperación de Paredes, que recibe falta. Antes, se picó entre Milton Giménez y García Basso en las narices del juez de línea, que los calmó para evitar apercibimientos.
17′ PT: Otra falta contra Paredes, que saca rápido para agilizar el juego. Darío Herrera obliga a rehacerlo porque la pelota estaba en movimiento, algo que hace exasperar a la gente. Paredes une las palmas de sus manos y las levanta en gesto de reprobación para el árbitro.
25′ PT: La primera exclamación de la gente local es por un centro pasado con derecha de Lautaro Blanco a Milton Giménez, que no llega de cabeza. Todo arrancó de una pelota profunda de Paredes.
31′ PT: Paredes remata desde media distancia y el balón rebota en Palacios y se va afuera. Ambos se agarran el rostro en señal de lamento. Boca no encuentra juego y Úbeda está impaciente, mirando el partido parado.
35′ PT: Palacios arma una buena jugada personal y profundiza al área para Milton Giménez, al que lo mueven fácil y la jugada se diluye. El delantero le recrimina al árbitro, pero la gente le pide un poco más a él.
41′ PT: Nardoni pisa el área y remata. La pelota roza el palo y se va afuera. Hubo un segundo de silencio sepulcral en la Bombonera por esa chance.
43′ PT: Patadón de Mura a Changuito Zeballos. El público pide expulsión, pero la amarilla es correcta. Paredes y Blanco también le comen la oreja al árbitro, que no cambia de opinión.
48′ PT: La última del primer tiempo es un tiro libre de Paredes que no puede ser controlado por Ayrton Costa en el segundo palo y luego casi termina en gol de carambola de Milton Giménez.
3′ ST: El Changuito Zeballos ensaya un par de piques explosivos que hacen levantar a los hinchas. En paralelo, Palacios genera un par de pérdidas que hace que muchos lo rezonguen.
8′ ST: Racing sostiene la posesión del balón, se adelanta en el campo y hasta llega con facilidad. Rojas pisa el área con Boca desacomodado y casi convierte. Por primera vez se levanta toda la cancha porque los hinchas buscan hacer reaccionar a los propios: “Y vamos Boca no podemos perder, y vamos Boca que tenés que ganar…”.
10′ ST: Lo que era contragolpe a favor de Boca termina con un mal control de Giménez, que nuevamente lleva al disgusto a todos los fanáticos. A favor suyo, recibe una infracción por la que amonestan a Colombo.
14′ ST: Almendra envía un tiro libre a la nada y se gana la silbatina de todo el estadio.
16′ ST: Todo Racing se le va al humo al juez por la amarilla que le saca a Barinaga por falta a Vergara. Entendían que era último hombre y evitaba ocasión manifiesta de gol. Darío Herrera señaló rápidamente a Milton Delgado, que podía llegar a cerrar al colombiano en esa jugada, y justificó su decisión.
21′ ST: Ovación del público de Boca para Ayrton Costa, que ganó la pelota y se proyectó en ataque ante la falta de intérpretes que rompieran las líneas. Pero de contra sale Racing, que termina con una buena jugada colectiva con definición errática de Maravilla Martínez tras una volea.
26′ ST: Úbeda llama a Velasco para mover el banco. Cuando el cuarto árbitro levanta el cartel y los hinchas ven que sale el 7 (Zeballos), se origina el gesto de reprobación más importante de una variante en los últimos tiempos. Nadie en la cancha entiende por qué el DT sacará al Changuito, que a esa altura parecía ser el único que generaría algo de peligro. Paredes, en la mitad de la cancha, también hace gestos y ademanes de desentendimiento con la decisión del cuerpo técnico.El mediocampista se quejó por la decisión de Úbeda
28′ ST: Costa se adueña de nuevos aplausos por ganar una pelota que parecía perdida y adelantar al equipo en ataque. Todo lo contrario sucede con Milton Giménez, que pierde otra dividida y exaspera nuevamente a los simpatizantes boquenses.
30′ ST: Gol de Racing. Se enmudece por unos segundos el estadio y todos en la Academia lo festejan. El pase de cirujano de Agustín Almendra fue clave para que Rojas le gane la espalda a Barinaga y centre a la perfección para la llegada de Maravilla Martínez, que le ganó arriba a Costa como una topadora y salió a festejar. “Que esta noche, cueste lo que cueste, esta noche tenemos que ganar”, reacciona la gente.
38′ ST: Boca no halla reacciones futbolísticas ni anímicas. El primer “uhhh” considerable de la noche se generó por un desborde de Merentiel con centro paralelo a la línea de gol que atraviesa toda el área. Se escurren los minutos y Úbeda no hace cambios, lo que enerva a muchos plateístas.
41′ ST: Maravilla le comete falta a Paredes en las inmediaciones del círculo central y los hinchas intentan empujar por el tiro libre a favor: “Y dale Bo, y dale Bo”. No obstante, el centro va a la cabeza de un Giménez que se la entrega en las manos a Cambeses. El 9 estaba aparejado con un defensor rival.
45′ ST: El árbitro adiciona seis minutos y Merentiel gana un córner. Esa vía parece ser la única con la que Boca puede llegar al empate. Úbeda manda a la cancha a Battaglia por Delgado. Causa sorpresa a más de uno que Paredes no corre a enviar el tiro de esquina sino que lo hace Lautaro Blanco. La acción, durante el tiempo agregado, se repite una vez más sin éxito en la ejecución.
50′ ST: Como en el banco visitante demoraron con la realización de la última modificación, Herrera adicionó dos minutos extras. Boca quiere, pero no sabe cómo. Racing, bien parado, se aferra a la victoria.
53′ ST: Final del partido. Locura total en el banco de suplentes visitante, con Gustavo Costas y su hijo eyectados en busca de fundirse en abrazos con los jugadores de campo. Mientras el racimo de futbolistas albicelestes se nutre, los de Boca se van reuniendo en la mitad de cancha, cabizbajos, antes de saludar hacia La 12 y se reconocidos con tibios aplausos. “Aunque ganes o pierdas, no me importa una mierda, sigo siendo Bostero, porque a Boca lo quiero”, se oye. A Úbeda, antes de llegar al túnel, sí lo reprueban con varios silbidos y algún insulto aislado de la platea baja.
A modo de despedida, los hinchas de Boca entonan un tema dedicado a la Academia con el ritmo de Matador de Los Fabulosos Cadillacs en el que el estribillo dice “Racing botón, Racing botón”. Lejos de amedrentarse, los futbolistas y cuerpo técnico académico toman como referencia el acompañamiento de la canción en los bombos, platillos y trompetas, pero se adueñan de las estrofas y entonan la que es propia de su equipo: “Tenés que salir campeón, este es el año, ustedes poniendo huevo y yo alentando, hace mucho tiempo, que la vuelta yo quiero dar, este año Academia no me podés fallar, vamo’ Acadé, vamo’ Acadé”. La fiesta racinguista siguió por varias horas y será eterna si se consagra en Santiago del Estero el sábado que viene.
