El ministro de Gobierno provincial Javier Touriñán, aseguró que la situación suscitada por el conflicto de los trabajadores del gremio de la construcción autodenominado los ‘Dragones’, motivará con su merma productiva la interrupción del conducto de gas que alimenta el oeste chubutense y su continuidad hacia Bariloche, perjudicando asimismo la línea que luego se une al gasoducto que lleva el fluido a precio subsidiado hasta Buenos Aires.
Touriñán sostuvo que esto está afectando básicamente el 15 por ciento de la producción de Crudo de la Nación, lo que tiene consecuencias importantes -en términos económicos- en cuanto a los ingresos que percibe la provincia y las municipalidades en el plano regional. “De hecho el petróleo que no se produjo ayer y el que no se produjo hoy, ya no se puede producir, son dos días perdidos”, subrayó.
El funcionario remarcó que hay afectación también sobre el Gasoducto Cordillerano, encargado del transporte de gas hacia toda la zona oeste de la provincia, desde Río Mayo, Río Senguer, y toda la línea que va hasta Bariloche y la conexión con el gasoducto neuquino, lo que restringe el consumo.
“Ahora hay que prepararse para una contingencia más grande porque dentro de 48 horas va a haber problemas graves de suministro de gas en toda esa zona”, disparó Touriñán en diálogo con El Comodorense. El servicio se vería afectado entonces desde Cerro Dragón hasta Bariloche, en Río Negro, y después hacia la ciudad de Buenos Aires, ya que se une al gasoducto neuquino, subsidiando el consumo de gas que hay en la Capital Federal.
Efecto local: agua y trabajo en peligro
Del lado de Comodoro, existe un efecto colateral sobre las personas que no pueden acceder a su lugar de trabajo. Touriñán dijo que hay también un inconveniente que tiene la Sociedad Cooperativa Popular Limitada, donde hubo algún tipo de deterioro sobre el viejo acueducto y no pudieron los trabajadores de la prestataria del servicio de agua, entrar a repararlo. Esto hace que se reduzca el bombeo y disminuyan sensiblemente las reservas de agua. “Dos regiones se ven fuertemente afectadas por esto”, enfatizó el ministro.
Denuncias y otras acciones
En tanto las empresas, han presentado denuncias en las dos jurisdicciones, tanto la Federal como la Provincial, prácticamente repitiéndolas. “La más fuerte ha sido la de Pan American por los destrozos que se han producido en sus instalaciones, la paralización del sistema de bombeo de petróleo y la merma en la producción de gas a inyectar dentro del gasoducto, y con eso de las posibilidades de sostener esto”, graficó Touriñán.
Y adujo que todo esto va más allá de los daños materiales que hasta el momento ha sido imposible cuantificarlos, porque no se puede entrar al lugar de los hechos. “En ese contexto de denuncias y por la competencia de cada uno de los sectores, las Justicias están trabajando y van a determinar la manera en que se imputan o cargan responsabilidades sobre unas u otras personas”, analizó el funcionario.
Desde el Gobierno están trabajando arduamente sobre la cuestión de la contingencia, tratando de no llegar a la vía de hecho en lo penal de afrontar la situación de desalojo por la fuerza, sino intentando mediar lo máximo posible. “La policía está permanentemente en el problema, tratando de conversar con la gente de este grupo que está tomando el sector”, explicó el ministro, pero admitió que “llegado el momento y ante la preservación de la seguridad pública, vamos a actuar, de eso que no quepan dudas”.
Para eso, han mantenido conversaciones con gente de Gendarmería Nacional, cuyos efectivos están esperando únicamente el llamado para venir a la ciudad, en caso que sea necesario.
