El Cerro Chenque fue escenario de una jornada que unió a vecinos, bomberos y un veterinario en una acción llena de solidaridad y compromiso. Una perra quedó atrapada en una ladera empinada, donde estuvo al menos 24 horas, generando preocupación.
Dos amantes del trekking, que conocen bien la zona por sus frecuentes salidas, se sumaron al operativo junto con un veterinario que, al enterarse por los medios, decidió acercarse para colaborar. Juntos, con la ayuda de los bomberos, llevaron adelante una maniobra arriesgada para poner a salvo al animal.
“Hace algunos años salvé un perro usando un palo y un cable. Por eso pensé en hacer lo mismo ahora”, contó uno de los protagonistas, que llegó gracias a un aviso de su amigo Eric, el primer voluntario que se acercó sin protección, confiando en su conocimiento del terreno.
En el lugar, una bombera equipada con cuerdas encabezó el operativo en la zona más peligrosa. A pesar de que lograron acercarse a la perra, esta se asustó y se alejó, complicando la tarea explicó Julieta Peralta, rescatista de Bomberos.
“Bajamos hasta donde pudimos, pero ella se alejó”, agregó. Finalmente, los voluntarios lograron asegurar al animal con un artefacto especial. «Los chicos pudieron trabajar abajo par agarrarla ahí con el artefacto que tenían» comentó Julieta.
El veterinario también jugó un papel fundamental, evaluando el estado de la perra y acompañándola tras el operativo. “Seguramente debe estar deshidratada”, adelantó, mientras se busca a su posible dueña. Por ahora, una vecina se ofreció a cuidarla temporalmente.
El operativo terminó con aplausos de los vecinos, reconociendo el esfuerzo y la valentía de todos los que participaron. “Fue un trabajo en conjunto. La perrita estaba muy asustada eso por ahí hizo que se complique un poco la tarea de rescate, porque por el lado que bajamos nosotros era medio inaccesible, dado que esa parte es media peligrosa por los derrumbes”, relató Julieta.
