Newell’s le ganaba a Quilmes por un gol de Scocco, pero sufría y el Cervecero consiguió el empate gracias a Caneo. Así, la Lepra puede perder la punta si Lanús consigue una victoria y los de De Felippe suman para el promedio.
Es la vieja ley del fútbol: los goles que no se hacen en un arco, entran en el otro. Y le pasó a Newell’s. El equipo de Gerardo Martino tuvo muchas situaciones para estirar su ventaja después del gol de Ignacio Scocco, incluso un penal. Pero no encontró ese 2-0 y, finalmente, Quilmes llegó al empate en el Sur.
En un encuentro parejo, con la Lepra apostando a la tenencia de pelota pero con Quilmes respondiendo con claridad sobre el arco de Nahuel Guzmán, Nacho fue el encargado de mostrar el camino con una definición exquisita: eludió al arquero y solamente tuvo que tocarla para poner el 1-0.
El delantero siguió haciendo de las suyas, aunque perdonó a Quilmes, equipo necesitado por los promedios. El mismo se fabricó un penal y lo ejecutó fuerte. Sin embargo, Silvio Dulcich le ahogó el festejo. Así, los de Omar De Felippe quedaron con vida y, para colmo, aprovecharon el cansancio del elenco visitante. Miguel Caneo comenzó a tomar más la pelota y a preocupar a los de Gerardo Martino.
Los locales empujaron y empujaron. Claro, una derrota los volvía a meter en la temida pelea por no descender. Y fue el Chino, que ante Colón metió dos, el que estampó la igualdad al tomar una pelota que quedó en el borde del área. El Tata no podía creerlo. Es que si Lanús consigue una victoria lo pasará en la punta del Torneo Final y River podría acortar distancia. Los tapó la Cerveza…
