El nadador comodorense Lautaro Troncoso Krapp se abre paso en la élite de la natación sudamericana. A sus 15 años, forma parte del poderoso club Flamengo de Brasil y de la Selección Argentina Juvenil, con la mirada fija en un sueño que persigue desde niño: representar al país en los Juegos Olímpicos.
Su historia comenzó a los 10 años, en una colonia de verano en la pileta del Club Huergo, cuando una profesora notó sus condiciones y lo invitó a entrenar. “Ahí empecé y no paré más”, recuerda Lautaro. El Huergo fue su casa deportiva, el lugar donde se forjó en la técnica y la disciplina. “Fue clave. Ahí nos enseñan a nadar en serio, a competir, a entender lo que significa representar a Comodoro”, rememora con gratitud.
El primer gran salto lo dio a los 13 años, cuando dejó su ciudad para entrenar en River Plate, en Buenos Aires. “Fue muy difícil dejar Comodoro, a amigos, la familia, aunque entendí que era necesario si quería crecer en esto”, explica. En River se consolidó en el circuito nacional, mejoró sus marcas y se ganó un nombre entre los mejores juveniles del país.
A los 15, llegó la oportunidad de Flamengo, un cambio que él mismo define como “es como estar en otro mundo”. Desde Río de Janeiro, describe la estructura profesional que lo rodea: “Entrenamos con planificación profesional, tenemos equipos médicos, nutricionistas, psicólogos deportivos, todo muy organizado”.
Pese a estar en la élite, sus raíces siguen en el sur. “Ser de Comodoro y estar en este nivel es un orgullo. Venimos de un lugar donde no es fácil llegar, donde tenés que remar mucho. Eso te da carácter”, asegura. Él sabe que representa a todos los chicos que, como él, comenzaron a soñar en la pileta del Huergo.
Su próximo gran desafío será el Torneo de Mococa, en Brasil, con la selección argentina, donde buscará seguir bajando sus tiempos en 100, 200 y 400 metros libre.
Es un paso más en un camino planificado que tiene un destino claro. “Si hay algo que aprendí desde que nadaba en Huergo es que los sueños se construyen. No se dan de un día para otro. Yo quiero llegar a un Juego Olímpico y sé que voy a hacerlo”, afirma con convicción, y cierra: “Hoy estoy en Flamengo, compitiendo por Argentina, pero cada vez que me tiro al agua, me acuerdo de dónde salí”.
Fuente: Pasta de Campeón
