El jefe comunal aclaró que el conflicto no se circunscribe solo a los marineros, que cuestionan a través de su sindicato al sector empresario porque los quieren obligar a ir a la baja con el convenio colectivo, sino que está llegando al resto de la cadena que incluye a los demás trabajadores de abordo, a los obreros de la estiba y a los operarios de las plantas pesqueras que de a poco ven llegar la crisis, precisa Radio Chubut.
El conflicto se vive en el sector de la flota de altura que no sale desde el año pasado por decisión de las empresas que denuncian pérdidas insostenibles, a lo que se sumó la protesta de los marineros que no quieren que los números den a fuerza de entregar conquistas. Por eso en los distintos puertos del país están 110 barcos amarrados.
El intendente de Puerto Madryn se comprometió en la búsqueda de una solución porque «no me gusta sacarme los lazos del cuello» de los temas conflictivos como estos, aunque directamente no está en su función encontrar la salida porque excede a sus responsabilidades.
Por eso participa en las reuniones donde ve que cada uno tiene su argumento para tener una postura aunque se lamentó porque en el último encuentro entre partes realizado en Buenos Aires, estuvieron a punto de llegar a un acuerdo y fue una «chispa» la que dejó todo en la nada.
