El Lobo buscó al lungo Rasic justo con Palermo en el banco del Tomba y el delantero tuvo la más clara, con un cabezazo que dio en el travesaño. Gimnasia fue más, pero no supo definirlo y repartieron puntos sin goles en el ‘Bosque’.
¿Cuántos partidos tuvieron a Martín Palermo como salvador, allá perdido de 9, pero aparecieron con un cabezazo al gol? Varios en el Pincha, muchos en Boca. Y en el Bosque, donde lo recibieron con más indiferencia que insultos, pasó algo particular: fue Gimnasia quien optó por un delantero con las características similares al Titán, se trata del lungo Rasic, que tuvo la más clara del partido. Sin embargo, el Lobo y el Tomba no movieron el tablero y fue 0-0 en La Plata.
La previa ilusionaba, ya que el local había ganado tres de cuatro y la visita demostró que cuando quiere, juega bien. Y ambos apostaron a los desbordes. Licht intentó en la izquierda del ataque tripero, mientras que Castillón fue por la derecha de la ofensiva mendocina. Pero ninguno llevó peligro importante. Apenas un remate de Pereyra y un cabezazo del mismo Castillón levantaron la mirada de los hinchas. Nada más. Menos que poco.
En el complemento siguió el roce (hasta pincharon una pelota) y el fútbol, bien gracias. Troglio y Palermo movieron sus equipos con los cambios y lo más interesante fue el ingreso de Juan Pablo Rodríguez, que le dio movilidad al ataque del Lobo y así el local dominó. Pasada la hora de partido llegó la más clara con un centro que cayó a la cabeza de Rasic (lleva tres tantos en el torneo), pero el travesaño se lo negó. Después los arqueros sacaron una cada uno, Carranza a Rodríguez y Monetti a Cristián García, y a casa. Gimnasia mereció un poco más, pero su carta de gol, no pudo imitar a Palermo.
Con el empate, el Lobo llegó a diez puntos en la tabla y quedó a uno de Newell’s, mientras que Godoy Cruz sigue penando abajo y el promedio está en rojo. La buena para el Tomba tiene que ver con una racha de seis partidos sin perder ante el equipo platense, con tres victorias y tres pardas. Poco, ni siquiera para conformarse.
